자유 ♡

427 45 52
                                    

"La defensa necesaria, es entendida como una defensa adecuada para evitar o frenar el ataque o agresión ilegítima. Es decir, entre los múltiples medios o formas de repeler la agresión –el agredido–, debe elegir la menos lesiva a los bienes jurídicos protegidos."

Leyó por cuarta vez consecutiva, pero para sus adentros. Estaba tan nerviosa que no lograba entenderlo del todo. El aire escaseaba y su camisa se ajustaba aún más alrededor de su cuello y en las muñecas, creando una prisión ficticia y anticipada. En su cabeza, los pensamientos iban y venían. Repasaba los hechos, los rostros que se había aprendido de memoria y las frases que sólo había escuchado en series y películas, hasta volverse la protagonista y vivirlo en primera persona.

—Jisoo.

La voz de su abogado pasó desapercibida.

Kim Jisoo era una mujer joven, casada, en el pico de su carrera profesional. Trabajaba para una editorial con mayor recaudación en el género infantil. Se habían dado el gusto de colaborar con artistas de todas partes del mundo y cerrar contratos con una impronta tan marcada que perduraría en el tiempo. A ella le gustaba fantasear con la posibilidad de tener un bebé con su esposo. Entonces le leería alguno de esos cuentos y jugarían a crear historias paralelas a las caricaturas.

—Señorita Kim.

El suspiro lo captó en el momento exacto. El abogado estaba perdiendo la paciencia y de a poco empezaba a mostrar signos de exasperación. A sus espaldas, el vidrio polarizado debía ocultar las miradas punzantes y prejuiciosas de numerosas e importantes cabezas del ámbito judicial. Sin embargo, no podía dar fe de la existencia de justicia en ese cuarto.

—Lo siento. —Habló finalmente. Por un arrebato impulsivo, reflejo, o nervios, quiso mover sus manos para acomodar su cabello y retirarlo de su frente, pero las esposas la retuvieron en el lugar. Se quedó estática, como dándose por vencida.

—¿Entendió lo que acaba de leer?

—No, doctor.

Los ojos del hombre se abrieron en grande, aunque prefirió tomárselo con liviandad para explicarle mejor y entonces ser de ayuda para ella. Inhaló, exhaló y acomodó su corbata.

—Lo que tiene ahí son los requisitos que pone el código penal para apelar por legítima defensa. Que es lo que nos interesa a nosotros. Cuando llegué aquí esta mañana usted fue muy clara conmigo, ¿recuerda qué fue lo que me dijo?

De la mesa a los ojos avellana. Del dolor al suplicio. A nadie le importaba las horas que llevaba ahí, si necesitaba ir al baño, si tenía hambre o si requerìa alguna medicina. Lo único prioritario allí era resolver lo que había sucedido. A pesar de que muchos parecían saberlo ya.

—Yo... Yo no asesiné a mi esposo. No quise hacerlo.

El celular del abogado sonó y tuvo que disculparse para ir a un rincón del cuarto y atender.

Kim Seokjin era un abogado joven, pero con algunas claras señales de éxito a futuro. Eso le decía su abuelo que había montado un estudio en sus buenos años hasta que una fuerte crisis económica lo dejó en ruinas y se tuvo que deshacer de todo para dedicarse a alguna otra cosa. Jin pensó que era buena idea seguir los pasos de la única figura paterna que en verdad valía la pena.

Regresó a la mesa y traía consigo buenas noticias.

—Terminaron el rastrillaje en su casa. Estimamos que en las próximas horas haya un poco más de información al respecto, pero lo que sí sabemos es que no hay ninguna prueba existencial que le indique a la policía ni a la defensa de la familia denunciante que era premeditado, o algo recurrente.

legítima defensa ─ kjs & ksj ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora