(Terminado.)✔️ El multimillonario Aarón Wertheimer, arrogante, mujeriego, frío y sin identidad, pero jodidamente irresistible.
Madison Wilson, famosa por emprender grandes negocios, astuta, fuerte y dispuesta a conocer más allá de lo básico.
Dos ent...
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- Dios mío, ¿Segura que estás bien? - cuestiona Amber.
La observo unos segundos y asiento despreocupada.
- Chica, el chico es salvaje - alega Emily riendo - ¿por qué jamás me llegan así? Puros muertos por mi dinero.
- No busques relaciones serias en estos tiempos - recalca Amber acomodándose el vestido - busca algo como lo de Madison y tú le mates el ganso.
Suelto una carcajada y alejo el labial.
- No solo es eso, Amber - digo riendo.
- Aun, nena, aún - dice sonriente - Estoy deseosa de que me hagan algo así!!!
- Dios reprenda al diablo - susurra Emily tapándose el rostro con una almohada.
Amber suelta una carcajada y deja las brochas sobre la mesa.
- ¿Acaso no se siente rico? - cuestiona.
La miro y frunzo el ceño divertida.
- Si - digo sincera - aunque ...
- ¡¡¡AUNQUE NADA!!! - grita - Se siente rico y eso es lo único que importa, ya verás cuando incremente otros juguetes.
- Pareces veterana en esto - alega Emily mientras alza las cejas.
- Los videos de YouTube me entrenan para al momento - dice orgullosa.
- Y Pornhub - recalo y ruedo los ojos.
- soy multifacética - dice y se encoge de hombros-
Suelto una risilla y niego.
- No creo que eso tenga que ver en nada con multifacética, se nota desde lejos que no eres de las personas que precisamente ven noticias. - dice Emily
- ¿Debería tomármelo como una ofensa? - cuestiona.
- Si dices ser multifacética entonces creo que si - alego riendo.
Amber abre la boca y mira hacia otro lado pensativa.
Después de la increíble sesión con Aarón. No querrán saber, para mi sorpresa propuso que nos bañásemos juntos y claro que accedí, todo parecía tan normal.
Parecíamos una pareja. Aunque sé que la cosa no va por ese camino en lo absoluto, no se comportaba como mi amo, sino como, Aarón, un Aarón bastante raro.
Seguido de eso, salí de aquella habitación casi volando, para mi suerte me topé con las chicas a la mitad del pasillo, no creo tener que hablar nada más.
No tuve más remedio que contarles todo, de todas formas la confianza está, pero sé que no debo seguir extremándome más y deberé de empezar a callarme muchas cosas.
Hoy es nuestro segundo día aquí y ¿qué creen? Lamentablemente tendremos que partir, surgió un problema en la empresa que nos amerita,
Pero sé que en algún momento tendremos la verdadera oportunidad de relajarnos. Supongo que elegimos un mal momento para ello.
