Quiero follar al nerd [HunHan] TERMINADA

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Respeta mi trabajo como yo respeto tu persona. No adaptes, copies o re-subas contenido de esta obra a ninguna otra plataforma, recuerda que el plagio es una forma baja de robo. Cualquier comentario que incite a la violencia será eliminado. Todos los eventos, personajes y locaciones son ficticios, esta historia sólo busca entretener.

Aquí vamos de nuevo, otro viernes que me quedo en casa, sin más compañía que la televisión y un six se cervezas en el refrigerador. Chanyeol no volverá esta noche, su novia tiene el dormitorio para ella sola y no aprovechar cuando su compañera está fuera sería una reverenda tontería. Ojalá pudiera alegrarme porque uno de nosotros tendrá sexo esta noche y no es que tenga un crush con mi roomie o que me falte con quien echar un polvo. Apoyo el noviazgo de mi mejor amigo al cien por cien, sin mencionar que ni loco saldría con un tipo como él, y no creo exagerar cuando digo que me sobran las propuestas para follar.

Mi pene es sociable, qué decir. No necesita más que un buen culo o unas ricas tetas para ponerse duro; incluso si lo único que hay es una buena porno, jamás he tenido problemas para conseguir una erección y pasarlo bien. Al menos, así era como solía ser. Hace algunos meses que las cosas empezaron a irme mal allá abajo y desde entonces no han hecho más que empeorar.

Jamás olvidaré el primer gran desastre.

El semestre tenía poco de haber comenzado cuando Kappa organizó su primera fiesta. Krystal estaba sola cuando la abordé, nos pusimos un buen pedo y terminamos haciéndolo en el baño de arriba. Seguimos viéndonos, pero no teníamos una relación. La noche que el equipo de baloncesto pasó a las finales, Krystal entró en los vestidores con el uniforme de porrista cubriéndole apenas lo necesario. Se me lanzó tan pronto que acabamos chocando con los casilleros, nuestras bocas devorándose la una a la otra y mis manos buscando la forma de sacarle aquel diminuto vestidito.

La visión que obtuve al conseguirlo se parecía mucho al cuadro de la diosa Venus, pero mi polla no reaccionó a su hechizo. Krystal no se molestó cuando (por más que lo intenté) seguí sin tener una erección. Era una chica increíble y pensó que aquello era una señal de que llevábamos mucho viéndonos y estábamos a un paso de volvernos exclusivos. Dijo que deberíamos ver a más personas y que si alguna vez me cansaba del sexo insípido, podía ir a buscarla y terminar lo que empezamos. Hice caso a su consejo, creyendo que si mi sexi porrista ya no me ponía, era porque esos días había estado alucinando con la nueva cajera del minisúper.

Su nombre era Hyuna y me sacaba siete años. Nunca creí ser de esos a los que les iban maduras, aunque treinta años no la volvían una anciana y en honor a la verdad, parecía imposible que una chica de mi edad tuviera un cuerpo como el suyo. Las diminutas blusas que usaba ofrecían una vista maravillosa de sus tetas, además nunca usaba sostén y sus pezones asomaban por debajo de la tela. Ni siquiera tuve que esforzarme para conseguir su número, Hyuna se me adelantó diciendo que su turno estaba por terminar y que si quería podíamos ir a algún sitio a platicar.