Love You (Ashley Purdy y tu)

Cap. 1

Hola me llamo (tn)______ Gray, tengo 17 años y soy súper-hiper-mega-archy-re fan de Black Veil Brides, sus canciones, su musica y... Los integrantes. Son todos una maldita bola de sexys crazy boys y me encantan.

Todos son mis amores, los amo a todos... pero mi debilidad es Ashley. Si, Ashley Purdy.

Estoy viendo una fotografía en el que esta el. La beso.

- ¡(tn)______! ¿Que estas haciendo? -Grita Canelle, una de mis mejores amigas y compañera de clases. -En el equipo de porristas te esperan.... Ah ¿Otra vez? ¡Ya deja esa fotografía!

-¡Claro que no! ¡es mía! y la persona que esta en ella también. -Digo babosamente.

-Si claro, apurate porque luego la capitana me reta a mi.

-Ahora voy.

Ella sale del salón cerrando la puerta.

Pero hay algo que nadie sabe y es que Ashley además de ser mi ídolo... es mi amante.

Así es, salgo con Ashley Purdy y nadie lo sabe. Es un secreto que compartimos desde hace un tiempo y estoy muy feliz así.

Guardó la foto en la mochila y salgo del salón rumbo a las canchas.

Cuando terminamos la practica decidimos ir a comer algo como amigas, asi que nos fuimos a un resturante. Cuando estábamos hablando de tonteras mi celular vibra en la mesa.

-Oye (tn)______ Tu celular. -Aviso mi capitana.

Lo observo, debe ser el.

-Tengo que contestar, ya vengo. -Digo mientras tomo mi celular para salir del restaurante.

(Llamada telefónica)
-¿Hola?
-Hola Vida ¿estas ocupada ahora?

Es el.
-Estoy comiendo afuera con unas amigas ¿porque? ¿Necesitas algo?
-Te necesito a ti.

Me estremesco.
-Esta bien ¿Adonde estarás? Digo nerviosa.
-Te iré a buscar, espera en ya sabes donde.
-E-esta bien.
-Nos vemos ahora, te quiero.
-Yo... también, nos vemos.

(Fin de llamada)

Corro hacia el restaurante y tomo mi bolso.

-¿Ya te vas? -Me pregunta la capitana.

-Perdonen, es que surgió algo y ya me tengo que ir. Nos vemos mañana en la práctica.

-¡Bye! -Se despidieron todas.

Camino unas calles y llego a un callejón que da hacia otra calle en la que no trascurren tantos autos. Allí hay un mercedes negro y apoyado en el esta la debilidad de las que les conté.

-Ashley. -Llame por lo bajo.

El se mira rápidamente hacia mi y sonríe.

-Hola preciosa, ven. -Dice extendiendo los brazos. Corro y lo abrazo. -(tn)_______ no sabes cuanto te extrañe.

-Yo también. -Sonrio en su hombro.

El me da un beso en la mejilla y me acomoda un mechón detrás de la oreja. Nos miramos.

-Vamos, ya quiero llegar a casa.

Me sonrojo y asiento avergonzada.

***

Abre la puerta de su casa y entro. Dejo mi abrigo en el estante y la mochila también.

-Hace mucho que no me traías a tu casa. -Le digo todavía de espaldas hacia el. -Y te extrañaba por últimamente ni siquiera me llamabas...

Me doy la vuelta y lo venir hacia mi.

-Por eso quería verte tan desesperadamente. -Mientras se acerca se saca la camisa negra que llevaba descubriendo esculpido y hermoso pecho y abdomen. -No sabes cuanto te he deseado.

Me agarra de la cintura con un brazo y tira para que Mr pegue a su desnudo y cálido pecho. Me sonrojo.

-De-demuestralo. -Le dije tratando de no sanar muy nerviosa.

El sonríe sensualmente y me da un beso corto.

-Claro que si. -Dijo en mi boca.

Me cargo como princesa hasta su cuarto y me dejo suavemente en ella.

-Que lindo uniforme. -Dijo con voz ronca. -Pero esta pollera es muy corta.

-Ah. -Gemi cuando sentí que el metía sus manos por debajo de la pollera.

-Los chicos de la escuela te deben mirar con mucha lujuria y deseo. -Dijo acercándose para darme un beso hambriento mordiéndome el labio inferior. Mientras estaba distraída con el beso, el me saco la corbata y empezó a desabrochar la camisa dejando al descubierto mi sostén.

-Mmh. -Gemi en medio del beso.

-Que lindos pechos, caben justo en mis manos. Tan sensuales.

Yo solamente podía gemir y sonrojarme mas, si eso era posible.

El se arrodilla en la cama, me levanta posicionandome arriba de sus piernas y yo rodeo su cintura con mis piernas.

-Estoy en mi limite (tn)______ ¿Lo sientes?

-Ah. -Dije cuando sentí algo duro chocando contra mi parte sensible.

Sonríe sensualmente.

-Menos mal que mañana es sábado. -Dijo antes de sacarme la camisa y tirarla al suelo junto con mi pollera y también ropa interior.