Los días habían pasado tan rápido como la primavera, creía que todo podría estar bien por primera vez en mucho tiempo, había estado yendo todos los días después de entrenar con mi hermano y su banda a practicar boxeo y todos los días lo veía a él, el cual no me había dirigido la palabra desde ese día del "beso" muchas veces lo vi con diferentes mujeres luego de que ganaba una pelea y aunque a veces sentí un presión horrible en pecho cada vez que las tomaba de la cintura para susurrarle en el oído o cada vez que hacíamos negocios llegaba con una mujer o se perdía con alguna de ellas, tal vez me de algo de rabia, pero en realidad me daba lastima por todas esas chicas.
-¡ey! ten cuidado-se quejo alguien.
-cuanto lo siento-digo apenada-estaba distraída.
-tranquila-sonrió-eso es usual en ti.
-ja j aja que gracioso Tyler-miro mal al moreno que tengo delante de mi.
-así me quieres nena-me guiña un ojo.
-oh raíz como lo descubriste-dramatizo.
-soy un encanto-se encoje de hombros.
Yo me rió a carcajada, él se volvió muy amigo mío desde que llegue por primera vez a este gimnasio, él es de un metro noventa de tez morena, pero no llega a oscura de ojos intimidante y ha de mencionar que tiene un cuerpo como si los Dioses lo fuera tallado, pero no lo veía de esa forma al principio el intento coquetear conmigo pero el tercer día me moleste tanto que le di en sus partes con una fuerte cachetada al día siguiente me pidió disculpa y desde entonces somos muy buenos amigos.
-aquí no se viene a ligar-dijo una voz profunda chocando hombros con el moreno.
-si pues aquí no se aceptan animales y mira estas aquí-Khalei me mira mal.
-bien vamos todos a ¡ENTRENAR!-grita Damián mi entrenador.
Yo sigo caminando hasta llegar al cambiador de mujeres dejos mis cosas y ato mi cabello en una coleta alta tomo los guantes junto con la vendas y salgo para donde se encuentra mi entrenador.
-muy bien hoy aremos algo fácil-me mira-tengo cosas pendiente así que no estaremos tanto tiempo como antes.
Yo asiento me coloco las vendas en cada mano y me acerco al saco pequeño que hay, empiezo con golpes suaves siguiendo todo lo que me dice mi entrenador, luego de 30 minutos estoy un poco sudada tomo un poco de agua muevo mi cabeza en círculos al igual que mis hombros y vuelvo otra vez a ponerme en posición para pegarle al saco.
-ya vuelvo sigue golpeando-oigo decir a Damián.
Empiezo a golpear el saco cada vez más fuertes cuando mi mirada se posa en dos personas que están a medio metro de mi muy acaramelados riéndose, mi respiración se acelera y golpeo cada vez más el saco, deseando que fuera a la estúpida rubia que tiene Khalei tomada por la cintura, la mujer se voltea y me mira con superioridad y eso hace que mi rabia aumente aun más siguiendo golpeando aun más fuerte de lo normal.
-¡BASTA ANNIE!-oigo el grito de Damián y me detengo en seco.
Khalei y la rubia se voltean su mirada refleja preocupación al mirar mis manos, cuando hago lo mismo pude ver como las vendas estaban llenas de sangre ni siquiera me había dado cuenta que estaba jadeando y que había golpeado tan fuerte que me rompí los nudillos y empecé a sangrar.
-ven acá mucha-dice Damián molesto, pero a la vez preocupado.
Caminamos hasta una banca cerca de su oficina, saco el kit de primeros auxilio y empezó a limpiar mis manos, solté un gemido de dolor cuando el alcohol toco mis nudillos mordí mi labio para no chillar de dolor.
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A N N I E
ActionSEGUNDA "DÚOLOGIA GANGSTER." "Cuidado, el infierno esta de vuelta y tiene nombre de mujer".