12. mapa

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Cuando Jungkook me dijo que me contaría todo era solo una excusa para seguir basándonos hasta que cansamos nuestros labios y volvimos a nuestras labores. Él se excusó diciendo que tener otro par de ojos los últimos días lo había irritado, pero que el plan del cortejo seguía en pie, cualquier cosa que eso significara para su mundo y su gente.

— Ella es Raeki, se quedará contigo mientras arreglo unos asuntos ahí abajo... — la mañana siguiente me encontré en la sala a una pelirroja de postura recta y mirada seria.

— Mi señor, ¿ya Hanam sabe sobre mí? — le pregunto.

Si, sentí escalofríos cuando le dijo "mi señor" pero silenciosamente me escabullí entre los muebles hasta quedar detrás de Jungkook. Abrazándolo con pereza, no quería que se fuera tan pronto.

— No será necesario, confío en que sabrás relacionarte y decir lo adecuado.

— Como ordene, señor.

— Hanie, ¿cómo amaneciste hoy? ¿si pudiste dormir bien? —Jungkook jugo con mis dedos haciendo cosquillas en las palmas de mis manos y yo sonreí asintiendo. — necesito que hagas lo que diga Raeki, no es una amenaza... solo se obediente y no te metas en problemas mientras no estoy. ¿Vale?

— Koo... ¿volverás pronto?

No quería sonar necesitada, pero estaba necesitada.

— Sí, tal vez para mañana ya esté aquí ayudándote con los libros de geografía.

— Entonces hasta mañana guardare lo que descubra...

— No lo intentes tanto o tendré que regresar antes para reprenderte.

Yo hice un puchero cruzándome de brazos y el solo me cargo como una niña hasta llegar al patio trasero donde el océano se revoloteaba menos calmo que ayer. Al parecer eran problemas serios.

— ¿Estarás bien? Los malvados de las películas son aterradores.

— Estaré bien Hanie, lo estaré si tú te quedas aquí.

Dejo un beso en mi mejilla antes de caminar hasta la playa, se despidió con la mano y se lanzó al mar sin más. Lo hizo tan fácilmente que incluso le creí que era parte pez y parte humano, en menos de un minuto ya no quedaba nada, es como si hubiera sido absorbido.

Me llene de mucha preocupación.

— No temas, no estamos tan lejos del pueblo y el rey Jungkook sabe nadar muy bien.

— ¿Ustedes... no tienen aletas o colas?

Por primera vez la seriedad de Raeki se esfumó. Vi una pequeña sonrisa.

— No, eran incomodas así que en la evolución nos deshicimos de eso. Con piernas es más fácil pasar desapercibidos en la superficie.

No dije nada más y comí el desayuno en silencio mientras la peli roja solo me veía con intensidad, era incomodo, pero me sentía normal a su lado. Como si lo hubiera estado en el pasado un par de veces, confiaba en mi intuición, si no sentía mi corazón comprimirse entonces fue una buena persona conmigo en el pasado.

Regrese mi atención a los libros de geografía, tenía un pequeño escritorio y había pegado evidencias en la pared de mi habitación. Con concentración Dojin me había ayudado un poco, pero faltaba mucho trabajo... sobre todo con mi padre.

Era científico y la mayoría de sus apuntes e incluso los míos habían sido robados por el gobierno.

Es decir, yo trabajaba con lo poco que quedaba de mi pasado.

— Hanam, ya pasó la hora del almuerzo...

Su voz me hizo saltar en la silla.

— ¿Qué? ¿Ya es tan tarde?

𝕽𝖆𝖎𝖓 ♛ JJK¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora