Las memorias de una chica perdida

prologo

Lo recuerdo, recuerdo todo a la perfección.

Recuerdo estar en mi habitación hundida en mis pensamientos. Recuerdo una pelea, recuerdo que me dijeron que nos iríamos de ese espantoso lugar, recuerdo un arma y a un hombre, recuerdo el sonido que hizo el arma cuando jalaron el gatillo, recuerdo que salí corriendo con una mano en mi maleta y la otra siendo sujetada por mi padre sin ver atrás. 

La dejamos así sin mas, la dejamos sin importanos nada, la dejamos a ella que dio cielo, mar y tierra por nosotros. ¿Porqué la dejamos?

La recuerdo con su sedoso cabello cayendo por su espalda como una cascada con pequeños rulos en las puntas, la recuerdo sentada en una silla a la derecha de mi cama cantando con una sonrisa de oreja a oreja, la recuerdo abrazando a mi padre sonriente jurando amarlo hasta la muerte y así fue lo amó hasta que murió.

Lo ultimo que recuerdo de ella es su rostro con lágrimas en los ojos diciéndome que nos iríamos pronto de aquel infierno.

Mi padre corrió hasta el auto pero cometió un error, ver para atrás, vio como un psicópata cargaba el cuerpo inerte y sin vida de su esposa.

Y lloró, lloró por su amada, lloró porque después de su muerte el no podría ir a dejarle sus flores preferidas como lo había prometido, lloró porque la dejo allí junto a su pasado su tonto y estúpido pasado que siempre se interponia en sus intentos de ser feliz El subio al auto en el que yo ya estaba lista para partir y manejo sin rumbo. alguno o al menos eso parecía. Luego de eso todo se volvió negro para mi.