O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O-O- O- O- O- O-O-
Hola a todos, ya llevamos varias semanas de cuarentena y la verdad es que no cabeza ya no es lo que era, cada vez me está costando más sacar ideas para ciertas tramas, pero espero remontar pronto. Sin nada más que decir espero que disfrutes de este capítulo y que estéis todos bien.
O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O- O-O- O- O- O- O-O-Al día siguiente, en el palacio de Esperancia, Ondine se encontraba algo nerviosa mientras Lady Astrid y la reina la llevaban a un elegante salón donde varias damas nobles las estaban esperando.
- ¿Así que está es la chica? - preguntó una de las mujeres mirando a Ondine de arriba a abajo haciendo que está se sintiera incómoda.
- ¡Es preciosa! ¡Nunca había visto a una jovencita tan adorable! - exclamó otra de las damas.
-Lo sé, es por eso que os hemos traído aquí, cuando la encontramos casi no tenía ropa y necesita sus propios vestidos- respondió Lady Astrid enseñándoles a Ondine como su fuera una especie de mascota.
-Estamos planeando dar un gran banquete este fin de semana para presentarla a toda la corte- explicó la reina- Así que necesitamos elegirle el vestido adecuado para la ocasión.
Rápidamente al oír aquello todas las damas se emocionaron, al verlas Ondine no pudo evitar recordar a sus hermanas, ya que estás siempre estaban hablando de adornos y formas para estar más guapas. Durante las siguientes horas todas las mujeres se dedicaron a elegir diferentes telas y patrones mientras los sirvientes se dedicaban a tomarles las medidas a Ondine y a apuntar las peticiones de las damas.
Mientras tanto, Jarl de encontraba caminando por el pasillo después de terminar sus lecciones, cuando de pronto pasó por delante de la habitación y no pudo evitar fijarse en Ondine y ver que aunque nadie más de daba cuenta, estaba bastante aburrida con aquella situación.
"Esa es justo la cara que pongo yo cuando estoy en mis lecciones" pensó Jarl con una sonrisa.
-Bueno ahora que ya hemos terminado, ¿Qué tal si tomamos un té todas juntas? - dijo la reina con entusiasmo.
Jarl de dió cuenta enseguida que Ondine al oír aquello había rodado ligeramente los ojos pensando en lo soporífera que sería la situación.
Sabiendo lo que se sentía en esos casos Jarl entró en la habitación para intentar ayudar a Ondine.
-Buenos días señoras- dijo Jarl saludando con una elegante reverencia- Hay algo que me gustaría pediros.
- ¿De qué se trata? - preguntaron la reina y Lady Astrid a la vez.
-Sí no os importa, me gustaría llevar a Ondine a que viera a mí caballo, he pensado que podría gustarle- dijo Jarl educadamente haciendo que Ondine se iluminase.
-No veo ningún problema en ello, ¿Qué piensas tú Astrid? - preguntó la reina mirando a su cuñada como con cara de cómplice.
-Me parece una idea maravillosa- respondió Lady Astrid con una sonrisa.
Rápidamente Ondine y Jarl de marcharon entusiasmados mientras todas las mujeres les miraban con una risita.
-Gracias por ayudarme con mi pequeño plan...- le dijo Lady Astrid a la reina.
-No es nada, créeme, nada más ver lo pendiente de que estabas de los dos en la cena supe enseguida que pensabas convertirla en tu futura nuera- dijo la reina con una risita
-Cómo tú has dicho, ayer me di cuenta de cómo se comportaba mi hijo con ella, nunca le había visto así con ninguna chica, además como tú dijiste claramente es una princesa extranjera, ¿Quién podría ser mejor? - dijo Lady Astrid con tono altivo.
ESTÁS LEYENDO
Magical Stories vol1: Sueños Solitarios
Fantasy¿Que pasaría si los cuentos de hadas fueran parte de un mismo universo?, ¿Y si Bella y Cenicienta fueran mejores amigas?, ¿Y si la sirenita y Cenicienta amaran al mismo príncipe?, ¿Y si el amor eterno no es lo que parece ser?, ¿Y si la bestia fuera...