Cuestión de piel

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Chicas ¿que os está pareciendo la novela? os leo en comentario :) Ahora si, os dejo el capitulo 4...

-Pues entonces, habrá que buscar un sitio donde estar a solas, y poder intimar. -Justo al terminar de decir la frase se sonrojó, y se disculpó-.

-No no, quiero decir, que como siempre nos interrumpen, y nunca podemos parar a conocernos, pues buscar un sitio poco concurrido para poder hablar, ya sabes, no me refería a intimar de hacer el amor, bueno, ya me entiendes. -Me decía mientras gesticulaba algo apurada y se movía nerviosa, mordiéndose el labio.

Yo la miraba y no podía dejar de sonreír, era graciosa, y ponerla nerviosa se estaba convirtiendo en uno de mis hobbys, el caso es que había entendido perfectamente lo que me decía, pero decidí dejarme llevar por lo que mi mente pensaba en ese momento, y le dije..

-Cariño, que si quieres intimar, nos podemos ir a casa.-Le susurre muy cerca del oído-. Luego me separe un poco de ella para poder mirarla a los ojos. Ella cerró los ojos, como si hubiera pronunciado las palabras mágicas, se mordió otra vez el labio y me miró. Bueno, más bien, clavó sus pupilas en mí.

-Tus trucos de seductora nata, no te van a funcionar conmigo.. ¿Por que no cenamos? ¡Me muero de hambre! -Me exclamó quitando le importancia a lo que me acaba de decir de una forma sumamente seductora-. Mientras, con su cuerpo y sus manos me acompañaba a la silla.

Que calor pasé, ¡Se me subieron los colores!. ¿Cómo se suponía que iba a poder cenar, con este calenton?.

Mientras cenábamos, Toni se acercó a nuestra mesa a preguntarnos que tal estaba la cena, -nos sugirió que probáramos el Tartar de Atún de Almadraba, a lo que no pudimos resistirnos.- ¡Y fue todo un acierto! Estaba buenísimo.

-¿Te gusta?.- le pregunte sonriendo, sin dejar de pensar en lo cerca que la tuve unos minutos atrás.

-¡Mucho! Me encanta el sitio, es súper acogedor,la comida esta deliciosa, y es mucho mejor que estar en casa twiteando cosas. -Me dijo riendo-.

-Cierto ¡Me alegro de haberte escrito! Te he librado de una noche de terrible aburrimiento. ¿Como piensas recompensarme por ello? -Le dije mientras me acercaba lentamente mirándola a los ojos y humedeciendo me con la lengua la comisura del labio-.

-Pues, no lo sé, ¿Que te parece si..? No termina de decir la frase cuando aparece Toni, otra vez.

-Chicas disculpar que os moleste, pero vamos a cerrar dentro de poco, y quería saber si necesitáis algo más, si habéis comido bien, si puedo hacer algo por vosotras..

Hombre pues irte y dejar de molestar, que estás muy pesaito hijo mio. Pensé. A lo que realmente le respondí..

-No, gracias, por mi estoy bien, estaba todo muy bueno. Y de verdad, no te preocupes que no necesitamos nada.

-Pues, a mi me gustaría tomar algo de postre-. Dijo ella riéndose y cubriendo con las manos su boca.

Los tres nos reímos, Toni se fue en busca del postre sorpresa para ella. Sorpresa por que no sabía si iba a tener nada que ofrecerle, no porque quisiera sorprenderla. Sino, por las horas que eran. Los postres escaseaban.

Estábamos solas en aquel bar, ahí la insistencia de Toni, el hombre querría cerrar, pero como es un muy correcto, no nos iba a traer la cuenta, ni apagar las luces, haciendo intento de que nos fuéramos. Simplemente se limitaba ha acercarse a la mesa, intentando que nos diéramos por aludidas. Ahí le doy la razón, por aludidas nos dimos. Pero ha decir verdad, ninguna de las dos queríamos que aquella noche terminaba. Por lo que seguimos mirándonos cómplices hasta que volvió Toni. Que llegó al momento. Con dos cockteles, así como si los tuviera ya preparados de antes, por la velocidad con la que los trajo.