El mar evoca a tranquilidad. Un lugar donde evadirse de la rutina, donde fundirse con las olas, cerrando los ojos, y dejando que la espuma del mar se lleve todo lo malo. Y allí estaban ellos dos, intentando colocar sus toallas en la arena, uno al lado del otro, en una declaración de intenciones. El mar estaba algo alterado, sería que el también estaba nervioso ante aquella situación. Ambos se tumbaron, pero sin decirse nada con palabras, solo miradas y sonrisas. Áfrika empezó a quitarse la ropa, y el quedó maravillado ante su cuerpo, pero no se lo hizo saber en ese momento. No era momento de romper la magia para dejar entrar la pasión, no tan pronto. Ella se tumbo definitivamente, dejando que el sol acariciara su cuerpo. Él cogió sus cascos, y se puso una canción de Bruno Mars, our first time, para ser más exactos. Y mientras sonaba, sin apartar la vista de ella, pensaba en lo maravilloso que era estar allí con ella, y las ganas de besarla que le comían por dentro, de decirle algo como; "llevo meses enamorado de ti, que no sabes la de noches que has sido la musa de mis poesías, la dueña de mis sueños, la ausencia en mi cama, en mi vida, que sería capaz de bajarte la luna por el placer de verte sonreír, de poder verte cada día en mi habitación, y abrazarnos, y hacerte el amor, y ver como eres feliz, y que me quieres, que me amas, que somos la promesa de una vida juntos". Pero a veces, tantas palabras se resumen en una sonrisa, y en un suspiro, y así se lo hizo saber. Ella debió notarlo, pero no quiso decir nada, prefirió disfrutar del momento, no todos los días sientes que alguien te quiere hasta el punto de que duele no rozar sus labios.
Áfrika se levantó de su toalla, y se dirigió a la orilla, él la observaba, dudoso de si ir o no. Los nervios y las inseguridades no son buenas compañeras de viaje, te hacen perder oportunidades. Ella, de mientras, pensaba en lanzarse a sus brazos, lo deseaba tanto que le quemaba el corazón. Pero ella era de esas chicas que prefieren que el chico de el primer paso, aunque esta vez se pensaba en si era lo correcto, al fin y al cabo lo quería, y no era momento de hacer caso a semejantes tonterías. "¿Si le quiero porque no voy a demostrárselo?", se repetía una y otra vez. Cargado de valor, él se dejó sus nervios en la toalla, y se dirigió a ella, y no preguntéis porque, pero la abrazo por detrás, sus brazos rodearon su cintura, juntándose en el ombligo de ella, y con un tono suave le dijo en el balcón de su oído.
-¿Sabes? Yo siempre he pensado que el amor es algo en lo que hay que pensar seriamente, antes de tomar cada decisión tiene que meditarla, pero no, contigo no puedo, no me preguntes porqué acabo de abrazarte de esta manera, porque me ha salido solo, como respirar, y es tan maravilloso sentir el tacto de tu piel. Áfrika, desde que te vi en aquella foto supe que serías mía algún día, y desde entonces no he parado de darle vueltas a eso, de perderme en la inmensidad de tus ojos azules, casi tan azul como el mar que tenemos justo enfrente. Yo no te voy a prometer que voy a ser perfecto a tu lado, que lo nuestro lo va a ser, nos pelearemos un millón de veces, me dirás que me vaya a la mierda tantas veces, como veces nos tragaremos el orgullo. Mira, yo .. yo .. bueno, te quiero, pero de los "te quiero" de hoy si, y mañana más. Que muero por que llegue el invierno a tu lado, de dejarte mis sudaderas, de compartir paraguas, y secretos, de ir de tu mano por una calle fría. De tenerte dormida en mi pecho cada noche. Yo no estoy seguro si el amor existe a estas alturas de mi vida, pero si no existe, esto debe de ser lo más parecido a el. No se me dan bien estas cosas, y puede que sea demasiado lanzado, pero no te quiero perder, aunque no seas mía, tu me entiendes, por eso quiero pedirte una cosa .. ¿quieres compartir una vida juntos?
- .. (una lágrima le bajaba por su tez)
-Dame una respuesta al menos, la necesito ..
-Franky, si hay vida después de esta, quisiera ser tuya de nuevo ..
Y no le dio tiempo a responder nada, pues lo que tanto tiempo ambos habían ansiado llegó, fusionaron sus labios, fue un beso salado, pero dulce a la vez. Por un momento el mar se calmó, y fue testigo inocente del amor verdadero que sentían. Y las palabras volvieran a sobrar, pues a centímetros de sus pupilas todo tenía más sentido para los dos. Supongo que podrían ver la felicidad reflejada en ellas, y joder, que bonito era sentirla, pero sentirla de verdad. Sin peros, ni condiciones. Y volvieron a abrazarse, después de tanto tiempo no querían separarse, no, era momento de disfrutar de ellos mismos. Y ella no podía dejara de mirarle, y de sonreír. "Coño, si sólo me ha dicho lo que siente por mi, y me he derretido por dentro, nunca me ha pasado esto, pero joder, mírale, no necesita aparentar nada para enamorar, creo que me va a dejar marca de por vida, ojalá sea a su lado .. "
Y así transcurrió su primer día juntos. Llegó el momento de despedirse, pero era de esas despedidas que odias que lleguen, y nada más acabar deseas que llegue el momento de ver a esa persona. La acompañó hasta su portal, y los 20 segundos que pasaron en silencio, mirando al suelo, fue de los "te quiero" más sinceros que he llegado a ver.
-Bueno, fea, ha llegado el momento de terminar el día de hoy, pero espera ..
-¿Que vas a hacer?
-(Sacando un rotulador de su mochila .. ) Mira, voy a dibujar nuestra fecha en tu portal, para que cada día que salgas de tu portal, pienses en mi, ¿va? Y esto se va a quedar aquí para siempre, jamás se va a borrar, y si alguna vez empieza a verse borroso, ya estaremos los dos para pintarlo aun con más fuerza, ¿entiendes? Como lo nuestro, si alguna vez flojeamos, será el momento en el que debamos luchar más por lo nuestro.
-Mira que eres idiota eh, pero me haces sonreír como nadie. te aseguro que no hace falta ver eso para pensar en ti.
-Oye ..
-Dime.
-Que gracias por el día de hoy, y por todo.
-Te quiero .. pero mi madre me va a pelear si no subo ya, dame un beso anda.
-Espero verte pronto ¿vale?
-Te lo prometo.
Y ambos se despidieron ese día, con la sensación de que era el principio de algo que cambia sus vidas para siempre. Pero felices.
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Gritándole al silencio.
Teen FictionEsta no es la típica historia de amor, es más, no es ni de eso. Trata del daño que pueden llegar a hacer las personas, del daño que uno mismo puede llegar a hacerse sin darse cuenta. Es una historia como otras tantas, algo que a todos nos puede lleg...