A Shayla le pareció bien todo lo que había escrito en los documentos, le preocupó que el nombre diera problemas, aun que dijo que con eso bastaba, no parecía en absoluto contenta. Con Sujai era bastante amable, se reían y gastaban bromas entre ellos, mientras que conmigo era más frío que un témpano. En un cuarto de hora Sujai había llegado a ser más cercano a Shayla que yo en una semana. Simplemente estupendo.
-Ahora entiendo cómo te llevas bien con ella- dice Sujai de camino hasta nuestras habitaciones -os parecéis bastante-
-¿En serio? - digo con indiferencia -sin embargo yo creo que somos muy diferentes-
-Uhhhh, eso suena un resentimiento- comenta -la verdad se la notaba contrariada contigo ¿Qué has hecho ahora? -
-¿Yo? Ha sido ella la que ha empezado ¿Te acuerdas? Esta jugando con nosotros- me quejo.
-No, no, esta jugando contigo ... ¿Lo ves? os parecéis mucho. Sois como críos de seis años, simplemente hablad y problema solucionado- suspira -Me siento demasiado mayor ahora mismo-
-No pienso seguir arrastrándome- digo con decisión -simplemente voy a olvidar todo esto y centrarme en graduarme con buenas notas aquí-
-Claro- dice sin creerse ni la palabra de lo que digo -seguro que tus notas superarán a tu exigente curiosidad ... Oh, tampoco es que puedas evitarla, ahora vais al mismo club- dice pensativo.
Mierda, es verdad.
-Simplemente utilizaré el aula para estudiar cuando nos reunamos y listo- él se ríe de mí.
Pasó un par de días hasta que Shayla se recuperó completamente y volvió a ir a clases, hasta entonces no había vuelto a ir a verla y me había centrado en estudiar. Me propongo como meta personal no hablarla en todo el día.
-¡Shayla! Tendrá un sitio aquí, deja un espacio entre él y yo. Da igual, puedo ignorarla incluso si se sienta a mi lado. Ella se sienta en el sitio haciendo ruido excesivo con los libros. El profesor entra y comienza la clase.
-Me han llegado los trabajos de los Eret, tengo que decir que estoy terriblemente decepcionado, muchos han resultado ser un desastre- el profesor continuo quejándose y comienza a decir las notas de los grupos de mesa por mesa.
-Seguramente solo han aprobado con buena nota los tinis- oigo susurrar a Sujai.
-Grupo 3- dados cuando llega a nuestras mesas -como equipo tienen un suficiente, aquí tienen sus trabajos individuales- lo reparan pacientemente y cuando me lo da, sospechoso decepcionado por conseguir otro 5-señorita Shayla, tiene usted un cero, se le olvidó Shayla había escrito tres folios y le había puesto un cero por una palabra. Ella no parece en absoluto sorprendida o frustrada.
-Comprendo, la próxima vez lo haré mejor- ella lucha en ocultar una sonrisa, y el profesor al ver que su nota no le importa demasiado, se va resoplando. Casi puedo escuchar a Sahara riendo al saber que tiene un 3. Sujai y yo nos miramos confusos. Él se encoge de hombros, gesticula "están locas".
-Viendo el resultado del trabajo, me veo obligado a mandaros otro trabajo en parejas ...- no ha terminado de hablar y ya están haciendo los equipos. Miro a Sujai.
-¡Sáhara! ¿Te pones conmigo? - dado de repente.
-Vale- dice algo roja. Me giro para ver quién estaba más libre, pero ya habían hecho todas las parejas salvo ...
-Parece que te tendré que aguantar otra vez- dice con molestia Shayla. Yo solo bufo -Te veo hoy en el aula XXX para hablar del trabajo, me gustaría terminar con esto antes de comer- sigo sin hablarla, pero noto que su voz vuelve a estar agotada ... ¿Habrá descansado apropiadamente o ...? ME DA IGUAL . Me regaño mentalmente por mi falta de fuerza de voluntad.
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DRAGONES
Science FictionHaske es mestizo. Harto de la discriminación racial de su país, accede a ir a una academia a otro reino por petición de "su padre". Allí conoce gente nueva y se deja fascinar por los secretos de la raza más débil... ¿O es todo por la impertinencia d...