demencia lasciva.

68 4 3
                                    

No suelo ir  a casas de extraños menos si ellos me llevan en sus autos , aún menos si me lo pide alguien que ni siquiera me ha dicho su nombre, pero  ahí estaba yo al borde del destino, había tirado todas mis fichas para ver qué pasaba. Bueno , resulta que me dijo que se iba a despedir de sus amigos y que en 15 mins nos encontraríamos en el árbol en que estaba apoyado hace un rato. Yo aproveché para ver si encontraba a Julieta, pero la maldita no aparecía, hasta que me llegó un mensaje.

“Ow bebe, lo siento por dejarte solo, te lo recompensaré lo juro, hablamos otro día, tengo victima nueva”.

Me pude haber enojado, pero así es ella, además yo igual me estaba yendo. En eso caminé hacia el árbol y ahí estaba.

Dentro de su auto todo era cálido eran no más de las 10, y parecían las 6.

-hey, ni siquiera me has dicho tu nombre- le dije

-Me llamo Valentín-

-y… ¿no  preguntarás mi nombre?

-Te llamas, Ariel, tienes 19 años, vas a la tienda de café que queda en la esquina de tu universidad todos los viernes y pides un cappuccino de vainilla-me explicó

-entonces …¿este es el momento que debo tirarme del auto en movimiento o qué?-. Me aseguré de revisar el auto por si encontraba un objeto sospechoso como una pala para enterrar cuerpos, o un cuchillo ,etc.

-No!, yo soy el que los prepara, me se tu nombre porque te lo piden para entregarte el pedido tonto-. Se rió fuerte, su risa es muy linda.

-Uffff , pensé que eras un acosador sexual o que venderías mis órganos por internet- bromeé

Valentín paro el auto.

-Hms no estoy seguro si podría hacer lo último, pero lo primero…-

Oh weón y la reconchatumare que estaba asustado, hasta que el estúpido volvió a prender el auto y dijo:

-Ay si solo bromeo tonto, no te preocupes-. Me dieron ganas de matarlo, pero lo único que pude hacer es reir.

-entonces, ¿Dónde vives?- le pregunté

-Hms , por ahí cerca de ahí y lejos de allá-. Se rió

-uy te gusta hacer bromitas ¿ah?-. me molesté

-Sí, me encanta- . siguió riéndose , incluso más fuerte.

Enojado no dije ni una palabra en todo el viaje, hasta que llegamos al centro de la ciudad y entramos al estacionamiento de un gran edificio.

Tomamos el ascensor y marcó el piso 15, nos quedamos mirando fijamente, creo que yo era menos disimulado que él, con la luz del ascensor pude ver bien sus rasgos, ojos color café oscuro , cabello alborotado y algo enchochado color castaño un poco claro, piel morena no muy oscura , tiene unos labios muy lindos y gruesos que hacen que su sonrisa sea mucho más linda. Volví a darme cuenta que estaba como maniático mirándolo.

Al salir del ascensor entramos a un pasillo con unas cuantas puertas, ventanas al final de cada pasillo y luces medianas , tenía un muy lindo alfombrado y un mesón con unas plantas que no podía distinguir si eran falsas o reales.

Valentín revisó todos sus bolsillos hasta encontrar su llave, cuando abrió la puerta quedé estupefacto, era muy espacioso y lindo, está muy bien decorado.

-tú departamento es muy lindo ,¿no que vendías café?-le dije

Se rió –El departamento es de mi papá, me lo regalo el año pasado para mi cumpleaños 18-

El departamento era muy espacioso, su sala de estar tenía un sofá muy lindo de cuero negro, y una televisión de pantalla plana enorme, además tenía un librero con muchos libros muy interesantes , también logré contar varios espejosy tiene  una linda alfombra roja en el suelo.

-bueno ¿y quieres algo de beber o comer?- me preguntó.

En realidad no quería pedirle nada, pero mi estómago me había ganado –bueno , en realidad tengo mucha hambre-.

-hms está bien , te cocinaré algo- dijo Valentín amablemente.

Me tomó de la mano y me llevó a la cocina, me sentó en una de sus mesitas y se puso a cocinar, debo admitir que amo que me hagan las cosas , sobre todo si me cocinan.

-¿y estudias o haces algo aparte de trabajar?

-estudio medicina- me respondió

- hey , yo estudio enfermería-

-Ow, serás mi enfermero sexy entonces- dijo con un tono algo lascivo mientras calentaba revolvía las pastas.

-Hms podría ser- le respondí con el mismo tono-.

Después de un rato de conversa y comida con vino en la mano, me llevó a su dormitorio, y se dirigió a su reproductor de música, la lado tenía una especie de caja con todos sus discos.

-escoge el que más te guste-me dijo.

Tenía de todo lo que a mí me gustaba, encontré algo christina perri, “Lovestrong” –cuando tiena 16 más o menos era mi disco favorito, es algo mamón y emo, pero realmente es lindo.

Puso el álbum y comenzó a sonar, su mirada está fija en la mía y mi corazón se acelera, puedo sentir como con cada latido aumenta el ritmo, de repente se acerca a mi hasta poder sentir su respiración, yo siento algo de miedo y curiosidad, me empuja contra su pared suavemente y acerca su rostro al mío mientras en eso mi corazón aumenta mucho más su ritmo y empiezo a sentir cositas en mi estómago, entonces cierro mis ojos casi por instinto y siento sus labios en los míos, y lo beso, lo beso como si de eso dependiera mi vida, en eso siento que sus manos bajan hasta mi cintura y luego a mi cadera, siento un raro escalofrío, y sigue bajando, hasta llegar a mi zona trasera. Creo que se me escapó un gemido o solamente  lo pensé, estaba rendido ante él. Me tomó en brazo y me llevó a su cama, me dejo tiernamente ahí, se sentía tan suave y cómoda, siguió besándome ahí hasta que me sacó la camisa y luego yo la suya, su piel es tan tersa, tanto que no pude resistirme a abrazarlo, el solo se limito a sonreír.

Después de eso pude notar su cara de malicia, esa cara de niño pequeño que está a punto de cometer alguna travesura , así beso mis labios hasta llegar a mi cuello ,luego viajaron hasta mi pecho y llegaron a  mi zona abdominal , luego se volvió a verme como para pedirme permiso, yo no podía desistir, no podía decir nada aparte de gemir, estaba tan rendido ante la lujuria del momento, desabrocho mi pantalón y bajo mi ropa interior , me dejo completamente desnudo, y beso mi sexo, mientras yo acariciaba su cabello. Sentía una corriente que pasaba por todo mi cuerpo, es mágico pensaba, no podía controlarme , gemía mucho, y parece que le gustaba eso.

Entonces pensé en actuar un poco más, me paré y lo empuje a la cama y le saqué todo lo que le podía sacar. Contemplé su cuerpo , era un adonis griego o algo por el estilo, así que bajé hasta su sexo y lo besé, era muy grande tanto que caía con dificultad.

después de eso , se recostó boca  arriba , y me subi ensima de el, podía sentir su sexo moviendose dentro mío , arriba y abajo , sin parar. Un rayo de placer que pasaba por cada parte de mi cuerpo, y gemía y gemía y gemía... ahhhh , lo abrazo y me dejo dormir ensima de el 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 06, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

¿cómo llegar a la utopía juvenil?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora