A veces los mejores momentos, son esos que no planeamos, que solo suceden.
Salía de su ensoñación cuando un pequeño dolor le molestaba en el costado, había pasado ya una semana después de la semana que se le dio de recuperación, mañana volvía a implementarse al trabajo, había hecho home office por supuesto, la agenda de Liam siempre estaba ocupada, era ya un hombre con familia, nunca le había revelado su edad, pero por lo que sabía rodeaba los 38 años, eso hacia que le llevara alrededor de 13 años, un poco creepy para ser verdad, pero su espíritu siempre lo mantenía en un 110%, trataba a Niall como si se tratase de un amigo mas, siempre tan casual, la forma en la que lo saludaba y siempre insistió en el trato coloquial, pero se padre jamás le permitiría que tratara así a un colega mayor que él, lo que era cierto era que su padre necesitaba siempre conexiones en todas partes y el hijo de los Payne siempre era bueno tenerlo de su lado, le preguntaba casi todas las ocasiones como se portaba y si estaba haciendo un buen trabajo, no Liam, él mismo, ya estaba acostumbrado a la desconfianza de su padre y a sus altas expectativas. Estos pensamientos lo volvieron a dormitar y a olvidar su dolor para poder caer en un fuerte sueño.
"Ni...." Una voz que sonaba ahogada, como si estuviera encerrada en otra habitación le insistía "Ni... ¡despierta hombre!" la fuerte voz lo hizo levantarse para poder escucharla ahora claramente, le dolía un poco el costado por haberse incorporado tan rápido, pero ahora solo veía a un rizado molesto que se veía que se acababa de levantar y se dirigía fuera de su habitación "Amigo, tu alarma no deja de sonar, creo que es hora de que te vayas al trabajo" froto un poco sus ojos y se levantó de la cama poniéndose unas pantuflas y dirigiéndose al baño mientras trataba de despabilar un poco.
Entró a su baño encendiendo las luces y viéndose un desastre frente al espejo, a veces le resultaba difícil creer que le resultaba atractivo a alguien si le llegaran a ver en ese estado, no iba a tomar un baño, no quería tener que volver a ponerse las vendas, lavó su rostro con un jabón caro que Harry le había dejado en el baño para dejar su piel más lisa y quiera que no, el jabón a veces le hacía tener esta hidratación y "piel coreana" que tanto anhelaba la gente en el internet y no es que hubiera pasado viendo tik toks de rutinas diarias de cuidado de la piel, solo le daba curiosidad como había gente que usaba más de 3 productos en el rostro para su cuidado, y el solo lavaba su rostro cuando se recordaba (o no bañaba por las mañanas) y bloqueador solar, porque su piel si era muy sensible al sol, y aun así siempre respondía un poco radiante y limpia, sufrió de acné en la adolescencia pero un buen dermatólogo lo trato rápidamente, aun recordaba ese tratamiento abrasivo que casi lo dejaba sin labios; volviendo a verse en el espejo ahora trato de peinar su cabello con un peine, tendría que teñirse el cabello pronto o tal vez dejarlo crecer de su color y cortar lo rubio, le gustaba mucho el rubio pero algo natural no caería mal, lo pensaría después, lo peino a un lado y lo fijo con un poco de cera, se despojó de su ropa y ahora sintiendo un poco de frío de la mañana se dirigió hacia su closét, que encerraba los distintos trajes formales y una cuanta ropa casual, su padre siempre mandaba a regalarle trajes o conjuntos, el día de hoy se decidió por uno de cuadrícula grande gris con líneas más oscuras, decidió que hoy no llevaría el saco puesto y solo el chaleco, lo mantendría allí si su jefe le pidiera asistir a alguna reunión, pero se sentía un poco más libre sin él, el código de vestimenta de la oficina era algo estricto pero Liam jamás le había llamado la atención por esto, a decir verdad siempre halagaba sus atuendos, desde los sencillos hasta los hechos a mano en la tienda favorita de su padre, que costaban casi la mitad de una mensualidad de su universidad, que ya es mucho, tomó el conjunto y lo dejó sobre la cama, volvió a su baño para usar su desodorante y un poco de una crema que olía muy rico que Gigi le había regalado alguna vez, olía a fresas, un olor femenino, pero le parecía un poco tonto clasificar olor en un género así que siguió usando la crema corporal, regreso a su habitación y se vistió con el pantalón, una camisa blanca y una corbata gris más claro que el traje, vistió el chaleco, puso una gabardina negra y volvió hasta su mesa donde estaban sus perfumes y relojes, puso un poco de perfume "Sauvage" de Dior y un reloj dorado muy sencillo, tomo unas gafas que usaba para poder verse un poco mas viejo que no tenían graduación, tomó su teléfono y cartera y salió de la habitación.
ESTÁS LEYENDO
Solo toma mi corazón
Hayran Kurgu“Me gusta el olor al café y el sonido de las olas rompiéndose en la costa, me gusta la rasposidad de sus barbillas y el olor de su colonia” “Pero entonces ¿Qué piensas hacer? ¿Qué tiene uno que no tenga el otro?” “Uno es el más correcto hombre admir...