Until The Sunrise

Delirios de Sueños

Me acusan de tener sueños delirantes...

Pero sigo teniendo esos sueños, aún sigo intentando perseguir esos sueños...

Tengo esperanza...

Tengo esperanza en el día... el día en el que esos sueños tengan una fecha junto a ellos... el día en el que esos sueños se conviertan en una meta, y, al final...

se hagan realidad.

Mi cuerpo cae sobre la nieve... cubriendo el blanco suelo. El sol se alza sobre mí, con un claro cielo azul. Estoy boca abajo, saboreando los copos de nieve en mi boca. Las secuelas de lo que acaba de pasar en la cueva aún permanecen en mi cuerpo, intento recuperar el aliento. Cada segundo fuera de la cueva es un alivio.

Siento los pelos de punta por todo el cuerpo, los cuales desaparecen con el frío. Empiezo a recuperarme mientras miro a mi alrededor, intentando averiguar dónde estoy.

Frente a mí, una muy densa niebla blanca, a ambos lados, dos enormes paredes rocosas, dos paredes que se unen por detrás formando un semicírculo. Las paredes estan formadas de piedras grises con algunas partes cubiertas de nieve, pero hay algo que captura mi atención... algunas áreas sobre las rocas relucen con un brillo intenso de color azulado. Es tan intenso que se ven resplandeciendo a pesar de la luz del sol.

Me confunde el hielo azul... pero lo percibo en varias partes a lo largo de esta extravagante pared rocosa. ¿Dónde estoy? Sigo girándome lentamente hasta que mi vista vuelve a mirar al frente... la niebla está retrocediendo... como si quisiera mostrarme mucho más allá... La nieve se detiene no mucho más lejos de mí, mostrando el hielo azul, el mismo hielo azul resplandeciente... un hielo que se extendía, formando un largo desierto abismo de hielo... tres gigantes pilares de hielo emanan de ese mismo suelo, elevándose hacia el claro cielo.

Su altura es enorme, pero dos de los pilares se sienten ridículos en comparación con el que se encuentra justo en frente de mí... es inmenso, se encuentra alejado tras los otros dos pilares.

La niebla sigue cediendo. El pico de una majestuosa montaña blanca empezaba a mostrarse en el horizonte, y muchas muchas otras van apareciendo poco a poco... mucho más pequeñas y lejanas... pero esas montañas no parecen comenzar desde aquí... Parece como si la base de las montañas nacieran por debajo de mis ojos... por debajo del horizonte... Acaso el lugar en el que me encuentro... ¿se eleva en el cielo? No, es imposible... pero ahora me cuestiono a mí mismo sobre lo que es posible e imposible... Mis emociones de estos últimos momentos, una muralla cayendo sobre mí, cruzar una puerta para caer en un lugar nunca visto antes, suenan demasiado surrealistas para mí... ¿es esto imposible? ¿Existe algo imposible?

¿Quién dicta qué es y qué no es posible?

En lo más alto del pilar más grande, yace un castillo de hielo, brillando con el mismo azul que todo el hielo del lugar. Grandes murallas y torres, puedo sentir la belleza de ese lugar desde la lejana distancia. Se encuentra distante en el cielo, pero... lo siento cerca al mismo tiempo... siento la necesidad de ir, siento la necesidad de llegar hasta allí, siento el deseo de alcanzar el castillo del cielo.

Empiezo a caminar a través del desierto abismo de hielo hasta que alcanzo el pilar... Me gustaría decir que es mi pilar... Camino alrededor buscando una forma rápida de subir, o escaleras, o cualquier manera de alcanzar la cima. Nada, no hay forma fácil de subir. Una fría brisa calienta el lugar, mi corazón anhela la cima del mundo, la eternidad de mi estatua... Rómpeme en pedazos si sientes la necesidad, pero haré lo que haga falta, llévame al castillo en el cielo.