Colapso... [TODODEKU]

Inapetencia

El chico de cabellos bicolores se dirigía a su salón de clases. Ese día no quería estar con alguien, quería estar en soledad sin que lo molestaran... O que le preguntarán cosas innecesarias...  Al llegar a su salón se dio cuenta de que era el primero y que faltaba mucho para que las clases comenzaran, así que se sentó en su puesto y apoyó su cabeza en la mesa que tenía al frente.

Pasaron unos treinta minutos y casi todos estaban en el salón. El chico de dos quirk observaba a su alrededor atentamente, Kirishima estaba junto con su novio, Bakugo, ¿cómo es que lo soporta? Ellos se encontraban junto el Bakusquad (a excepción de Mina). Su compañera de que se sentaba a su lado, Yaoyorozu Momo, hablaba animadamente con Jirou Kyoka, quien era la pareja de la azabache, en el primer puesto se encontraba Aoyama, Shoji, Tokoyami, Sato y Koda conversando trivialidades, Hagakure, Aisui y Ashido se en una costado del salón y... Por último se encontraba el Dekusquad... Iida estaba regañando a Uraraka por algo y... Midoriya se encontraba a su lado intentando calmarlos por lo que estaban peleando... 

La campana sonó y el maestro entro, todos callaron y pusieron atención a la clase (a los que les interesaba). Todoroki aparto la mirada hacia la ventana, preguntándose cuándo fue la última vez que se sintió así... Sin darse cuenta la clase había terminado. 

Las horas pasaron lentamente hasta que llegó la hora del almuerzo, todos se levantaron, algunos se fueron corriendo a la cafetería, otros solo caminaron lentamente. El comedor, como siempre, estaba llego y era difícil moverse, una vez que consiguió su comida se fue a sentar con su "amigos" . Midoriya le hizo una seña para que pudiera ver en dónde se ubicaban y al llegar se sentó al frente suyo, teniendo a Iida a su lado.

— Las clases han estado muy interesantes ¿no lo creen? — Dijo el chico de lentes.

— Sí, aunque las clases de Cementoss-sensei son muy aburridas — dijo la castaña.

— Debo de admitir que aveces me da sueño con sus lecciones, ¿tú qué opinas, Todoroki-kun? 

El chico peliverde con pecas se dirigió al chico serio, la verdad era que no puso ningún interés en las clases, había estado vagando en sus recuerdos toda la mañana, ni siquiera escuchó los timbres del descanso, si no fuera porque sus compañeros, que son tan ruidosos, hubiera estado en la misma posición todo el rato.

— Oh, sí...

— ¿Ocurre algo? No has tocado tu plato de Soba — le pregunta Midoriya al ver que su comida esta intacta.

— Nada, solo no tengo hambre.

No mentía, por más que fuera su plato favorito no lo había probado, la razón era: porque no sabia a nada, lo cual le parecía curioso, pero no se preocupo mucho por eso. Iida le dio un discurso sobre que debía comer bien si quería ser un héroe, que debía alimentarse para tener energía y entre otras cosas más que no le dio importancia.

Pasaron las horas y la noche cayó, Shouto se encontraba en su habitación cuando Eijiro toco la puerta de su habitación para avisarle que la cena estaba servida, de manera respetuosa y que no sospecharan nada, le dijo que no cenaría por deberes que debía hacer. Kirishima le pregunto si quería que le trajera la comida a su cuarto, el bicolor lo rechazo diciendo que después comería, sin más que poder ofrecer, el de cabellos teñidos se retiro confiando en que todo estaba bien. Oh ¡cómo se equivocaba!

Todoroki se quedo sentado en medio de su cuarto buscando información sobre su inapetencia. Busco y busco durante unos minutos.«De seguro no es nada» se decía a si mismo «es temporal». Se fue al baño y saco la pesa que había, se coloco encima de ella y se fijo en los números que mostraba: 50 Kg... Había bajado unos 7 kilogramos y eso era mucho. Esa noche Shouto no pudo dormir tranquilo...