𝙼𝚘𝚗𝚜𝚝𝚎𝚛 𝚛𝚎𝚖𝚎𝚖𝚋𝚎𝚛 𝚖𝚎 [En edición]

Parte 40| Curiosidad...

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🛸.

El aire estaba muy fresco sobre su cara que decidió quitarse por unos segundos su pesada chamarra, Taehyung se sentía muy a gusto, que incluso el ventoso frío le hacia cosquillas. 

Había dejado a TN en su casa y se sentía sumamente relajado después de haber pasado tiempo junto a ella. 

Pero que diantres estaba diciendo, se acomodó mejor la chamarra y siguió caminando a su casa, estaba pensando mucho en el tema y se notaba ¿emocionado?.

No, eso lo preocupaba, desde unos cuantos años que trató de olvidar sus sentimientos, su pasado oscuro lo obligó a ello, y como el mismo prometió no se podía dar el lujo de dejar que algunos fantasmas regresen. 

Pero ya era demasiado tarde y el lo sabia.

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Tn regresaba a casa, y un Jimin muy preocupado la recibió. Por suerte Taehyung se había ido minutos atrás.

-¿Donde estabas?, ya no tenia a quien llamar para preguntar si te encontrabas bien.

-Jimin...- lo abrace 

-¿Que te paso algo?-la reviso 

-No, no, mas bien la nieve no me dejo regresar a casa y tuve que quedarme con una...amiga

No pudo decirle la verdad ya que si lo hacia, Jimin seguramente sufriría un infarto al enterarse que había dormido en la casa del hombre que recomendó o mas bien ordeno que se alejara, y que también metió  a su casa sin su permiso. 

-Llamé a tu trabajo y me dijeron que te habías ido con alguien.

-Si era mi amiga

- Muy bien viendo que sufriste mucho, hoy te voy a consentir.

-¿Ah si?

-Claro para que estoy.

Jimin prácticamente se convirtió en su sirviente personal, y aunque ella no quería el insistió. Le hizo comida deliciosa y al final preparo unos bocaditos que comieron mientras veían una variedad de películas de todo tipo. Y también trato de pintarle las uñas, que aunque no funcionó se vio muy tierno al hacerlo.

Todo el día se paso mimando, tratando de hacerla olvidar el "mal día" que tuvo.
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Un lugar oscuro, no podía ver absolutamente nada, ni siquiera podía moverse, traía sus manos amarradas, y por lo visto algo tapaba sus ojos, y en el crudo silencio se escucho un ruido de unas botas contra el suelo.

-¿¡Quién eres!?

-No necesitas saberlo niña.

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Se despertó tn. Acababa de tener una horrenda pesadilla.

Muy realista por cierto, pero nada que su desayuno no vaya a hacer olvidar.

Fue a la cocina con la intención de hacer un rico desayuno, nutritivo que había visto hasta muy noche en Internet.

Cuando no puede dormir, se pone a organizar su día de mañana, y un video le hizo razonar sobre su alimentación chatarra que tenía últimamente.

Pero al llegar al comedor un olor delicioso ocupó su nariz.

Jimin había preparado una gran variedad de bocadillos mañaneros. Huevos revueltos, tostadas, mantequilla, café con leche. Todo era estilo americano.

Nada parecido a su batido nutritivo que tenía mente.

-¿ya despertaste? , te hice el desayuno.