Conservando la cordura...

Mundos que se desmoronan tan fácilmente...

Me estoy cansando. Mi cabeza da vueltas, y cada vez la confusión es más grande. Inspiro por la nariz y expiro por la boca. "A ver", pienso. Analizemos la situación: me levanto en una mañana normal, mi padre no está en el trabajo y mi madre histérica. Me hacen hacer equipaje, me meten en el coche, me quitan el móvil y me dicen que no volveré a ver a mis amigos; y ya no sé que pinta la abuela Sofía en todo esto.

-Mamá, dame el móvil, en serio. -Mi madre duda un momento.- Por favor, mamá.

Ella me mira con mirada dolida al oír mi petición, y me da el móvil. Marco el número de Núria, pensando en qué decir. "Eh, Nuria, no me esperéis para ir al instituto, que mis propios padres me están secuestrando. Pero tranquila, vuelvo en nada. ¡Adiós!" No, no tengo ni idea de lo que le voy a decir. Pero no me serviría tampoco de mucho, porque no me contesta.

Pasan algunos minutos. Llamo por segunda vez, pero tampoco me responde. Entonces miro a mi madre, con el corazón saliendome del pecho. ¿Qué demonios está pasando? Entonces entiendo que lo que el problema mucho más grande de lo que creía.

-Papá, pon la radio.

Mi padre me mira con mirada intensa a través del pequeño espejo interior del coche, y sé que está dudando. Pero al final se decide, porque enciende la radio. Escucho la voz de un hombre, profunda e intranquila, mientras cuenta la noticia.

"Larissa Williams, la famosa presentadora del telediario español, es una infectada del virus Z. Jeanie Quiwards, la primera infectada de este fatídico virus, se descontroló, y fuera del control de los guardias mordió a la presentadora, que se encontraba después de grabar cerca de la zona peligrosa. No ha habido constancia de esa agresión hasta la presentadora fue encontrada ayer a las doce de la noche en Japón, Tokio precisamente. Larissa fue encontrada en estado deplorable, notablemente enferma. Contando con la alta peligrosidad del virus, han sido 24 los infectados del virus, y 287 personas en observación en Japón."

Levanto la mirada a mis padres. Mi padre está conduciendo, impasible, mientras mi madre me mira con atención. Su mirada me dice que esté atento, porque hay más. Trago saliva antes de ponerme a seguir escuchando.

"En cambio, desde la fuga del gas Z en las ruinas del Rey Jan, el orígen de la infección, han habido otras fugas en otras ruinas mayas en Sudamérica. Se ha encontrado el virus en cientos de personas en el mundo y en otros objetos que podrían ser portadores del virus y los cuales están siendo desinfectados en estos momentos. Se han encontrado infecciones en varios lugares de Ásia y Europa, y la gente está evacuando ciertos países. El pánico está sembrado por esos lugares, y las autoridades no pueden acabar con el caos en las ciudades más pobladas."

Miro con pánico a mi madre, que pone su mano encima de la mía, consoladora. Núria, Abel, mis abuelos, tíos y toda mi familia... No puedo parar de pensar en sus rostros cuando cierro los ojos. ¿Qué pasará con ellos? ¿Los volveré a ver? ¿Cuál es la situación de España en este caos mundial?. Me siento cada vez más mareado, así que cierro los ojos por un momento y me preparo para escuchar al presentador, que ha vuelto a hablar.

"Ahora mismo, los países europeos España, Italia, Luxemburgo y Russia no son seguros, pero se están encontrando infecciones en las fronteras de otros países. Hay muchas zonas bajo cuarentena, pero la situación se está descontrolando y no se pueden cubrir todas.

Repetimos, los países España, Italia, Luxemburgo, Russia y las fronteras no son lugares seguros."

Ahí acaba la noticia, y no se oye nada más. Claro, con todo el follón que hay ahora no veo a los de la radio poniendo anuncios de Activia, no... Veo que mi madre se prepara para hablar, y se aclara la garganta ya que está a punto de llorar.