Capítulo 5
"- No quería acercarme pero de verdad necesito hablar con ustedes y entender algunas cosas. –
Me congelé.
Era él.
Dante."
La puta madre – pensé – Pero alguien pateó rápidamente una toalla para tapar lo que me quedaba de cabeza al descubierto.
- ¿Qué haces aquí Dante? – Preguntó Cami.
- Quiero saber qué hace Nikki acá. – Contestó él.
Yo sólo podía pensar en su voz. No había cambiado para nada.
- ¿Disculpa? ¿Es que acaso la isla es tuya? – Ironizó Nikki y yo comenzaba a asarme bajo esa toalla con mi cuerpo enterrado en la arena.
¿Dónde estaba Florencia?
- Claro que no, no es eso lo que quise decir. Me lo preguntaba porque nunca habías venido antes. ¿Viniste sola? –
- ¡Ya traje el agua que faltaba! ¿Dónde fue mi mamá? –
Noooooooooooooooo! Mi hija.
Iba a salir de donde estaba escondida cuando Nikki habló e interrumpió mis pensamientos.
- Te demoraste siglos! – Dijo Nikki siendo drámática y sabía que le estaba sonriendo a mi hija – Vamos a buscar más agua que creo que nos faltó –
Mi hija se reía muy fuerte y sus voces se alejaban así que supuse que habían vuelto a la orilla.
- Mira Dante – Escuché a Cami - Nikki va a estar aquí de vacaciones y es verdad que es la primera vez que viene así que por lo mismo, te voy a pedir que no la molestes. No sé qué quieres con ella de todas formas –
- ¡Quiero saber Cami! Necesito saber de Alex, y tú jamás has querido decirme nada. ¿Aún ella y Nikki son amigas? Porque si lo son entonces Nikki quizás sabe que pasó.
- Dante, ¿Todavía? Han pasado siete años, ya es hora que sigas con tu vida.
- Y lo hice. Seguí con mi vida y en eso estoy, pero necesito entender algunas cosas para poder avanzar. Por favor Cami. – Suplicó.
Creo haber escuchado un dejo de tristeza y frustración en su voz y por un segundo me hizo sentir culpable por haberme ido sin una explicación.
Aunque eso sólo duró un segundo porque luego vino a mi cabeza la escena exacta de él y la zorra de Daphne follando en nuestra cama.
Lo que más se repetía en mi cabeza era la cara triunfante de Daphne mirándome con una sonrisa maldita en su cara.
- Sabes que si Alexia quisiera hablar contigo ya te habría buscado, así que por favor déjanos tranquilas a nosotras y no hagas que terminemos odiándote también.
- ¡Pero necesito saber por qué ella me odia!
- Adiós Dante – Le dijo Camila.
¿Puede por favor irse ya? No iba a aguantar ni un minuto más aquí abajo.
- Lo siento Cami, tienes razón. No voy a molestarlas más – Esta vez su voz se escuchaba lejana y eso me dio la señal para saber que se estaba yendo.
– Ah, por cierto. ¿Nikki tiene una hija? – Se detuvo y mi corazón también lo hizo.
- Sí, una muy tierna. Hasta luego Dante – Finalizó Cami y se sentó al lado de donde estaba mi cabeza, dándole la espalda a él.
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Bajo la luna llena
RomancePrólogo Había intentado escribir muchas veces y siempre lo dejaba a medias. Esta vez era distinto pues me sentía lista, estaba lista. ¿Han vivido uno de esos amores que por más que quieras no puedes terminar? ¿Esos amores que no puedes sacar de tu...