Te amaría si pudiera /Tom Riddle/

CAPITULO 4: DISCUSIÓN

Ya hacía dos semanas que las clases habían empezado, y Tom Riddle se sentía en el paraíso. Una pequeña parte de él se enfurecía al ver que muchas personas tenían el potencial de hacer magia y no sólo él, como siempre había creído, pero ese sentimiento fue rápidamente sofocado al posicionarse sin lugar a dudas como el primero de todas sus clases. En las más densas como en historia de la magia, necesitaba dedicarle horas de estudio como sus compañeros, pero en las que era necesario el uso de la magia dió a conocer su talento natural al dominar casi todos los hechizos sin esfuerzo. 

Y no había perdido el tiempo, no señor. Durante su primera semana ya tenía en su punto de mira al profesor que más fácil le seria de manipular, cosa que no era un problema, porqué pociones dada por Horace Slughorn, era la que se le daba mejor y al ser el jefe de su casa, entendía mejor su manera de pensar. También había notado que, si bien no había hecho nada directamente, Dumbledore no le quitaba ojo de encima. Bueno, eso no era del todo cierto, " Siempre la mira a ella, y no entiendo porqué " pensó con desprecio.

Pues Elanor había sido toda una decepción. El pensaba que con su gran nivel intelectual, la joven Slytherin rivalizaría con él en las clases y por fin tendría una adversaria digna. Pero no había podido estar más equivocado. Se saltaba la mayoría de las clases, y cuando asistía siempre se ganaba como mínimo una decena de puntos menos, cosa que fastidiaba en demasía a Tom: ¡él era el que ganaba la mayoría de los puntos, maldita sea! No era justo para nada.

Pero todo eso solo hacía que el misterio que envolvía a esa chica le produjera más curiosidad. No habían vuelto a hablar después de la ceremonia de apertura, dónde solo se saludaron por mera educación. Después cada uno había ido por su camino. Mientras que él se juntaba con Black, Malfoy y algun otro pardillo más de buen apellido (bueno, más bien, ellos se juntaban con él ), ella no le había dirigido la palabra a nadie. 

- ¡Tom! ¿Me estás escuchando?- dijo Abraxas sacando a Riddle de sus pensamientos. Estaban sentados al lado del lago, en su descansado entre clases. Era una costumbre que habían adoptado al ver que el pelinegro siempre se escabullía a leer entre clases, a principios de semana decidieron seguirle. La cosa no cambió mucho, Tom los ignoraba la mayor parte del tiempo y pasaba el rato leyendo o pensando en la manera de abordar a Elanor. Ya tenía pensado el plan perfecto.

- Ya veo que no - suspiró al ver como Tom cerraba el libro- Estábamos comentando la actitud de la rubia revelde, Elanor creo que se llamaba - dijo con desinterés, pero todos ahí sabían como se llamaba la chica, porfavor, si estaba en boca de todos.

- No hace falta que disimules Abraxas - se burló Black - todos aquí sabemos que en verdad te mueres por sus huesos.

- ¡Mentira!- exclamó Malfoy con las mejillas sonrosadas, cosa que hizo reír más al grupo. Eran llamados La Élite, pues estaba formado por miembros exclusivos de las grandes familias sangres puras: Malfoy, Black, Lestrange, Nott, Crabe y Zabini. Todos ellos se conocían desde pequeños por los negocios y reuniones de sus padres y una vez en Hogwarts decidieron continuar su "amistad" por conveniencia futura. Habían incluido a Tom Riddle por su gran talento, ya que no tenías que ser muy brillante para prever que el muchacho triunfaría después de graduarse.

-¿Me habéis interrumpido sólo para recordarme el estúpido enamoramiento de Abraxas por Elanor?- reprochó molesto. 

- No, más bien todo lo contrario.- dijo Zabinni con una sonrisa malévola - Queremos darle una reprimenda. Nos está haciendo perder puntos y a ella parece no importarle en lo absoluto.

- Solamente queremos que entienda quien manda aquí - justificó Malfoy.

Tom sonrió de lado - A veces creo que me leéis la mente, debe ser por eso que nos llevamos tan bien - estaba satisfecho por haberse pasado las semanas previas a Hogwarts leyendo libros sobre socializar y la mejor manera de ganarse la confianza de la gente.