🌹.⃗ ༉‧O ⃟ 1﹫🍒

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— Narradora —

Ahí estaba de nuevo, en aquella gran y "humilde" mansión de uno de los héroes más poderosos de Karmaland.

Entre dulces y cariñosas caricias, algunas cuantas palabras bastante sucias.
Claro, era lo de todas las mañanas después de una larga noche de solo sexo, en ningún momento algo tan amoroso.

— ¿Fui un buen bebé hoy, Daddy?— habló Rubén, con un tono bastante inocente. Samuel rió ligeramente acariciando la cintura del rubio quien descansaba sobre su pecho.

— Siempre has sido un buen bebé, pequeño — respondió, en un tono dulce aunque sonando ronco.

Samu. De nuevo me están fastidiando con mis deudas, ¿Hoy sí podrás pagarlas?— Samuel bufó, se levantó de la cama un poco brusco, quitando los brazos de Rubén de su pecho para poder sentarse en la orilla de su cama.

— Y aquí vamos de nuevo. ¿Crees que siempre voy a estar pagando tus deudas? Pues no, Rubén. Me cansé ya, no siempre voy a estar teniendo recursos, no siempre voy a tener que darte lo que quieras— habló, poniéndose su ropa y después caminando hacia el lado de la cama donde el rubio estaba.

— Bueno... Se suponía que yo estaba contigo por- — Fue interrumpido por el azabache, quien tomó su muñeca con fuerza, Rubén se quejó por ello— ¡Oye, suéltame que me lastimas, coño!

— Doblas. Ya no quiero ese contrato absurdo. Esto queda hasta aquí— habló con firmeza, observando al pobre y asustado híbrido quien solo podía retorcerse en un intento fallido de que el ojimorado lo soltara.

Por su lado, Samuel se acercó al oído de Rubén con lentitud y al estar su boca al lado de la oreja susurró— Muchos lo hacen mejor que tú— y sin más se alejó, soltando la muñeca de Rubén quien ahora hacia lo posible por no llorar de la desesperación.

— Te quiero fuera de mi casa en menos de diez minutos.

El azabache salió de la habitación, con un andar tranquilo.
Aunque Rubén solo se mantenía observándolo con odio. ¿Qué mierda haría ahora?

Se sentía un cobarde, se sentía usado. Tal vez siempre fue así.

Caminaba por el pueblo, cabizbajo, abrazándose a sí mismo en búsqueda de la protección que nadie más le daba

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Caminaba por el pueblo, cabizbajo, abrazándose a sí mismo en búsqueda de la protección que nadie más le daba.

Veía como todos los aldeanos le señalaban, probablemente era por sus ropas o las marcas en su cuello.
Maldijo en voz baja y entre dientes. Todo el tiempo esas malas palabras iba hacia Vegetta, el chico que tanto se aprovechó de su necesidad de dinero.

El camino parecía eterno. Aveces les daba unas miradas amenazantes a los aldeanos que escuchaba murmurar.
Sabía que todos ahora querían tratarle como un simple necesitado. Conocía a Vegetta, no tenía duda en que ese chico comenzaría a decirles a todos lo mucho que hacían, pero siempre de forma que lo perjudicaría a él.

Todo parecía estar tan jodido.

Al llegar a su casa cerró la puerta con fuerza, sin importarle los ladridos que dio Coringa debido al estruendo que se hizo presente de un momento a otro. Aunque el pequeño cachorro no tardó en calmarse cuando vio a su dueño.

Rubius lo acarició un poco y después caminó hacia su habitación, donde se tiró a la cama soltando un leve gruñido.
Se sentía cansado, pero eran tantos pensamientos los que rondaban por su mente que su sueño tardó en llegar.
Simplemente sé quedó dormido a duras penas.

Sus leves risas se oyeron en la habitación, era una mañana más en la que estaba con Luzu

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Sus leves risas se oyeron en la habitación, era una mañana más en la que estaba con Luzu.
Simplemente todo surgía, nada era planeado. Tenían una gran amistad a pesar de todo lo que pasó entre ambos.

Manolo jugaba con Frederick, era sorprendente como se habían agradado tan rápido pero también era tierno. Eran como hermanos a pesar de las muy obvias diferencias.
Todo estaba yendo bien. Luzu y Auron hablaban de la alcaldía, las elecciones serían pronto y el de mechón amarillo se había postulado.

Se ponían de acuerdo,trataban de mantener un orden para el día siguiente.

Sin más que decir, Auron tomó sus papeles y después a Frederick.

— ¿Nos veremos mañana temprano? Para terminar todo bien y eso...— habló Luzu, caminando al lado del menor.

— Sí, ten por seguro que vendré temprano. Estoy emocionado aunque sé que la mayoría votará por alguien más. Por Cerdus Gil tal vez, si es que se postuló de nuevo — ambos soltaron una ligera risa.
Al estar en la puerta el menor salió, aunque antes de irse volteó para sonreírle al castaño, en forma de agradecimiento por todo.

— Mañana será un gran día— se susurró Raúl para sí mismo.

Y claro que lo sería.

Y claro que lo sería

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†Yang†

My new Daddy • ❲ Rubiusplay ❳ (CANCELED)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora