Un día me fui a quedar a la casa de mi abuelo, todo era normal, hasta ya llegada la hora de ir a dormir.En un costado de la habitación había un montón de cuadros con caras extrañas y terroríficas, pero a mi abuelo no le gustaba que moviera sus cosas, así que con ese pensamiento me logre quedar dormido
Al día siguiente note que el en aquel lugar donde se ubicaban los cuadros no eran cuadros
Sino que era una ventana...