xReportes de la nave n°162-005×

Invitado no deseado.

PUNTO DE VISTA: ALBA

Encontré un pequeño planeta con color púrpura, el sonido de el maletero es cada vez más intenso, cargo el cañón y me acerco a la parte trasera del vehículo, y con la mano libre, chasqueo, haciendo que automáticamente se abra.

-...¿Sorpresa?-

¿¡PERO QUÉ COÑO!?

-..¿¡PERO QUÉ COÑO!?¿¡Qué haces aquí!?-

-Te esperaba más feliz de verme. Aunque...Eh, parece que las cosas no van muy bien. Me di cuenta cuando dijiste eso de mafias interdimensionales y destruir planetas me preocupé un poco. Sólo un poquito. Y eso de estar muerto. Gracias, eh, e-e-en serio.-

-No deberías estar aquí, no es posible...-

Retrocedo cargando el cañón aún más y apuntando contra el.

-Y eso me hace pensar que eres un parásito cambia-formas...-

-¿Un qu--? WOWOWOWO, Okey, baja el arma, no soy un...lo que sea que has dicho, ¡soy yo! el confiable Mateo-- NO ME DISPARES PORFA--

-Demuéstralo, pequeño bichejo.-

-tU ERES ALBA E-EH,, TE-TE ENCANTAN LOS VIDEOJUEGOS, EL ANIME, (huh que virgen), TE ENCANTA LA MIEL Y LA MOSTAZA Y EL SUSHI Y LA PASTA Y QUE PASEMOS EL RATO JUNTOS, AhhhH-

....Sonaba como toda una gallina cobarde. Sí, ese era mi Mateo. Huh.

-¿Cómo coño te metiste en la nave? No entiendo, ¡incluso TeoBot lo revisó!-

-Me metí justo antes de que salieras y partieras.-

-ooOOooh, eso tiene sentido..-

-Heh, si, pero baja el arma, anda...-

Bajo el arma y le miro, haciéndole una señal con la cabeza para que salga de la nave, y obedece al momento.

-No tienes ni idea de en qué te has metido.-

-Eh..¡En una nave!-

Me olvidé de lo tonto que eras. Joder.

-Siiiiiigghhhhhh...En un gran lío, con todo lo que dije puedes darte una idea.-

De todas las cosas que hubiera imaginado, nunca esperaría que él se hubiera aparecido. Es lo último que hubiera pensado...

-No podré devolverte a la tierra...-

-...Es una broma, ¿verdad?-

Preguntó el de casi negros cabellos, con una asustada sonrisa.

-...No.-

-....¡Pero hey! Podremos..¿tener una aventura juntos, no?-

-Ese no es el punto. Todo esto lo hice para protegerte, ¡n-no para que vengas a tu muerte!-

-Oh vamos, ¡puedo ser un buen compañero! Tengo carisma y algunos chistes que--

Le interrumpió, frunciendo el ceño.

-Esto no es un juego. Hay gente muy peligrosa buscándome, y ahora estás aquí. Y no te puedo volver a la tierra porque ya me están buscando ahí.-

-¿Pensabas...irte sin avisar otra vez?-

-Esto supera cualquier decisión moral, Mateo, no tienes ni idea en la cantidad de lios chungos en los que estoy metida.-