Carreteras curvadas y elevadas en rocas montañosas,
reflejo azul en el cristal del coche polvoriento.
Música resonando en mi cabeza,
mas y mas curvas,
mareándome al ritmo de la música.
¿Rocas, porqué caéis?
Seguid vuestro rumbo,
no molestéis, ya que yo estoy enamorado de la música.
Enamorado del olor del agua salada.
No acabes viaje,
que si lo haces, dejaremos de hablar,
conversaciones infinitas como el horizonte azul,
olas y olas moviéndolo todo, pero para mi, este verano,
deseé que nunca acabase.
Ojalá vuelvan estos tiempos,
Padre.
ESTÁS LEYENDO
Memorias de un niño roto
Short StoryMemorias de un niño roto consta de una gran variedad de relatos, cada uno con diferentes significados, la pura realidad, dolor, amor, amistad... Es decir, todo lo que nos rodea. Adéntrate en este mundo, desde el punto de vista de un niño que con el...
