PÁJARO

5 0 0
                                    


Érase una vez un pájaro,

posado en mi ventana,

cantando sin parar.

Molesto lo hacia parar,

pero él seguía día tras día cantando.

Mientras, sus cantos retumbaban en mi habitación.

Vete pájaro pues no me ayudas.

Después de un tiempo deje de oírlo,

me perdí en el olvido,

ese pájaro me recordaba quien era,

cada canto era una parte de mi,

hasta que dejé de escucharlo.

Memorias de un niño rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora