Cuando se despertó, la cama estaba vacía y hacía frío. Parecía como si Ai Ziyu hubiera estado
ausente por mucho tiempo. He Zhishu se dio vuelta lentamente, se agachó en la cama y cerró
los ojos por un rato más. Su cuerpo todavía estaba demasiado débil, porque habían estado
ocupados toda la madrugada. Ahora, siente que su cintura y sus piernas están demasiado
sensibles y, por lo tanto, se avergüenza de no poderse mover.
En ese momento, la puerta se abrió con suavidad y He rápidamente fingió estar dormido.
Sintió que alguien estaba a su lado, y apretó las sábanas con los dedos... Antes de darse
cuenta, su espalda estaba siendo envuelta por algo cálido. Duro, pero muy acogedor... Un
gatito comenzó a ronronear en su pecho.
—Mi amor, feliz cumpleaños. —Ai Ziyu se inclinó y besó desde el lóbulo de la oreja de He
Zhishu hasta la línea de su delgado cuello—. Levántate.
Zhishu se encogió de hombros y apretó al gatito entre sus brazos.
—No me molestes. Me estás picando con tu barba…
Ai Ziyu no hizo mucho más para convencerle, solo sonrió y se acomodó de frente a He Zhishu
para robarle otro silencioso beso.
—Levántate, un rato nada más. Te esperaré abajo.
He Zhishu se sentó con dificultad inmediatamente después de que percibió el silencio, se
arregló los botones del pijama y se frotó con suavidad la frente y los ojos... Una vez abajo,
caminó por la casa vacía hasta que escuchó un ruido fuerte en la cocina, similar al de platos
cayendo sobre el suelo. Se asomó por la puerta y vio a Ai Ziyu, sonriendo de una manera
verdaderamente grande.
—¿Qué pasó?
En Ai Ziyu había una exagerada cantidad de harina sobre su delantal que tenía dibujadas
pequeñas flores. Traía en la cara una mirada tonta y reía a carcajadas mientras intentaba
quitar de sobre la cabeza de un perro grande, un diminuto costal. El perro estaba
completamente blanco y todo alrededor de ellos era un desastre.
—Intentaba hacer un pastel.
Zhishu tenía todavía al gatito sobre sus brazos, y parecía casi tan asustado como él.
—Eres increíble.
Ai Ziyu camino hacia él, lamió la harina que manchaba la comisura de su boca, y luego abrazó
a He Zhishu hasta hacerle caer sobre el sofá de la sala de estar. La mano de Ai Ziyu estaba
muy caliente, y ella creó su propio camino sobre la cintura de He Zhishu a través de su
pijama, le frotó suavemente hasta crear una línea imaginaria que conectaba su pubis con la
cara interna de su muslo. He se curvó contra él, y a cambio obtuvo un susurro sobre su boca.
—La harina está toda sobre mí. —Ai Ziyu no lo soltó—. Te voy a compartir un poco.
Sus movimientos no se detienen, y Ai Ziyu entiende que es difícil poner incómodo a He
Zhishu. Su mente está volviéndose borrosa nuevamente, a pesar de que le funcionó bien para
controlar su cuerpo la noche anterior porque tenía miedo de lastimarlo. La técnica y la fuerza
que ejerce Ai Ziyu es muy placentera, y los músculos tensos de He Zhishu lograron relajarse
casi por completo. El masaje se extiende por mucho más tiempo del que esperaba, y He
Zhishu se siente avergonzado por haber interrumpido a su cocinero especial...
—Me siento mal por ti... Estabas muy concentrado. ¿No es cierto que el pastel todavía no está
listo?
Zhishu se levantó del sofá y fue directamente a los brazos de Ai Ziyu para darle un último
beso. Ai Ziyu no dijo mucho, y frotó suavemente el costado de He Zhishu con la palma de la
mano. Finalmente se levantó. Caminó dos pasos hacía la cocina y de repente recordó lo que
iba a mostrarle.
—¡Lo había olvidado!
Ai Ziyu sonrió y se volvió para abrir la puerta de seguridad. He Zhishu se preguntó qué iba a
hacer Ai Ziyu y se inclinó para adelante. No esperó ver a un gran perro dorado entrando
alegremente con un enorme moño sobre la cabeza. Ai Ziyu se aproximó porque los gatos no
querían caminar, y regresó con ellos entre los brazos, arreglados de la misma manera. He
comenzó a reír.
—Ya se bañaron. ¿Pueden estar contigo? —Ai Ziyu se paró frente a él y dijo—: ¿Quién de ellos
es tu favorito? Crecen muy rápido, ¿verdad?
Los ojos de He Zhishu son gentiles y amables, y se siente realmente feliz desde el fondo de su
alma. Estira los brazos y abraza al gato que tenía los ojos más tristes, pensando que era
verdad que esas pequeñas cositas habían crecido en nada de tiempo. Puso al animal contra su
pecho y murmuró:
—Te quiero, Shen.
✤✤✤✤✤✤
Los dos perros no dejaban de lamer completamente la cara de He Zhishu. Ai Ziyu fue a la
cocina para tomar un par de frutas, y después regresó para ofrecerle.
—Esto es algo que podemos comer todos juntos, los perros, tú y yo.
Más tarde, se sentaron a ver la televisión, y Ai Ziyu llevó todavía más refrigerios ligeros a la
mesita de café. Algunos gatos se fueron a la terraza para tomar sol, y otros subieron a la
ventana porque el clima era excepcionalmente bueno. Las tartas de queso horneadas por Ai Ziyu son muy fragantes y se ven muy bien. Cuando los perros las ven, se levantan y mueven la
cola como si fuera un molino de viento.
—Estos niños podrían comerse a su madre si la tuvieran aquí. —Ai Ziyu le dio una rebanada a
un perro, y retiró rápidamente los dedos para evitar ser mordido—. He, tú no vayas a comer
tanto. Está muy dulce.
He Zhishu ignora automáticamente la segunda parte de la oración, sonríe y dice:
—¿Qué no es mi cumpleaños?
Zhishu le dio un mordisco enorme, estaba muy caliente, muy dulce, y no tenía mucha
mantequilla. Los ojos de Ai Ziyu brillaron, pero no respondió.
Pronto, ya eran las cinco de la tarde y estaban justo a tiempo para comer. Ai Ziyu preparó la
mesa y luego fue a ver a He Zhishu, que seguía sentado.
—Mi amor, feliz cumpleaños.
Ai Ziyu estaba medio en cuclillas frente al sofá, mirando a He Zhishu con esa evidente mirada
de enamorado.
—¿No me habías felicitado ya en la mañana? —He Zhishu extendió los dedos, acarició la
mejilla de Ai Ziyu y sonrió—. ¿Vas a volverme a traer a los perros?
Ai Ziyu tomó ambas manos de He Zhishu entre las suyas, su actitud es muy seria.
—Tengo otro regalo para ti.
Y sacó algo que había sido preparado desde hace mucho tiempo en el bolsillo lateral de su
pantalón: Una pequeña caja de terciopelo rojo, que ahora yacía en la palma de su mano. He
Zhishu frunció el ceño, Ai Ziyu abrió la caja y le mostró que era un anillo de plata con la
forma irregular de una rama de flor con diamantes azules incrustados. Un anillo muy
hermoso, la luz de la ventana crea un efecto muy suave de "flash" cuando lo golpea... No se ve
femenino, pero sí muy delicado.
—Lo siento. —Zhishu cerró suavemente la caja del anillo—. No puedo aceptarlo.
El anillo es una muestra especial de afecto, no puede permitirse esta responsabilidad porque
su historia de amor, es absolutamente efímera. Además, le daba algo de remordimiento
desearlo tanto, porque cuando se quitó de los dedos el anillo que había estado con él durante
ocho años, pensó que nunca podría usar un segundo en toda su vida...
—Mi amor. —Los ojos de Ai Ziyu son cariñosos y profundos como el mar—. Acéptalo, pero no
lo uses si no quieres...
—Tengo mucho miedo... Porque voy a perderte también...
Ai Ziyu sonrió.
—No vas a perderme, porque voy a sostenerte muy, muy fuerte.
Saben que se están engañando a sí mismos, pero no quieren romper con la ilusión.
—Pero si tengo que rogar, lo haré. —Ai Ziyu abrió la caja, sacó el anillo y dijo—: Te lo ruego...
Ponte mi anillo.
He Zhishu se quedó en silencio, le acomodó el cabello tras la oreja y comenzó a murmurar:
—Entonces, prométeme una cosa... Después de que me haya ido... no quiero que hagas nada,
no me entierres. Eso me daría mucho miedo... Quiero, poder mirar a mi alrededor. —El tono
de He Zhishu estaba en calma, y no parecía diferente de una charla habitual. Vio que los ojos
de Ai Ziyu se suavizaban. —Los 150,000 de la tarjeta se quedan para ti, no los guardes... Sé
que no necesitas dinero, pero...
El cuerpo de Ai Ziyu temblaba intensamente, pero se las arregló para insertar el anillo en su
dedo anular. Esto, significa que se lo promete. El tamaño del anillo es adecuado, cubre las
huellas que dejó el anillo de Jiang Wenxu. Ai Ziyu se puso de pie y, sin ninguna advertencia,
sostuvo a He Zhishu y le dio un beso profundo y prolongado. Por primera vez, utilizó este
método descarado para besar y conocer de una manera más íntima el interior de su boca...
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Los diez años en que más te ame
Teen FictionUna pareja (He Zhisu y Jiang Wenxu) despues de estar diez años juntos, Jiang engaña a He con varios hombres. He Zhishu por otro lado esta viviendo una triste realidad, esta enfermo. Tiene leucemia. Y se lo oculta a Jiang Wenxu. Mientras He Zhisu hac...