HE VUELTO

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La mañana estaba a punto de comenzar, faltaba aproximadamente unas 2 horas para que amaneciera por completo, Zuri y Nuka ya empezaban a dar salida hacia el árbol de Rafiki.

Habían obtenido una pequeña indirecta por parte de Dhakar pero si lograban matarlo sin que él se los ordenara seguro que se los agradecería, además; devían buscar medicina para curar a Tiifu, de eso se trataba esta visita, aunque para Nuka era..... diferente, él quería volver a los recuerdos de Rafiki y tenía un desalmado pero asombroso plan para darle la noticia a todo el reino de que estaba vivo.

Pasó el rato, y el sol aún no salía, esto era bueno ya que así hiban a poder "charlar" con el viejo mandríl mas cómodos.

Por fín llegaron a las praderas, aquél lugar del que hace poco tiempo Zuri había cometido un asesinato, al parecer la idea en su cabeza de volverlo a hacer no estaba tan mal, y, aunque nunca tuvo problemas con Ono, matándolo pudo descargar un poco de la ira interna, algo de lo que sentía por dentro y que jamás lo había contado.

¿Ves algo?
Dijo Nuka agazapado observando el gran árbol desde una zona segura

Nada
Recibió por respuesta, Zuri también se preocupaba por su posicion, al parecer ahora estaba más experimentada en el combate y la cacería, aunque nunca asistió a alguna clase de "entrenamiento", la vida que tenían todos en las lejanías le había obligado a tener que aprender cosas nuevas.

Poco a poco los dos leones se fueron acercando al árbol, no podían escalarlo así por que si, eso alertaría a Rafiki y sospecharía de ellos, además de que al ver a Nuka escalando sería muy extraño y los tomaría como intrusos.

Definitivamente debían hacerlo bajar de alguna manera, pero.... ¿cómo?

Ya hace unos días habían "analizado" la manera en como engañarlo para tomar lo que les diera y así poder curar a Tiifu, ya era difícil mantenerla bien, ya no podía cazar, tenía muy poca fuerza para levantarse siquiera, y si, aún así bajo las amanezas de sus captores había delatado a el grupo que Jasiri dirijía, aquella pobre hiena al que le cortaron la lengua y le dejaron ciega, ahora era como un alma en pena, pocas veces se le veía rondando, sola, o tropezando con algunas piedras, siempre que caía se lavantaba rápidamente y se agazapaba en posición de ataque, trataba de escuchar lo que alrededor sucedía y...... cuando por fín se daba cuenta de que había tropezado, seguía su camino hacia la nada.

La manera de tratar de engañarlo era fácil, Zuri se había enterado de que todos pensaban que se había ido de las praderas para hacer su propia manada

(una completa mierda) pensó mientras aún se mantenía agazapada.

Era el momento de comenzar el plan, la hembra comenzó a caminar hasta que se enconntró a unos escasos metros del gran árbol, mientras, Nuka se mantenía distante, no quería ser visto por el mono, quería según su plan que todo fuera una "sorpresa", así que una vez que Zuri se acercó lo suficiente; se esfumó entre la hierba, y rodeó el árbol.

Ahora que todos estaban en posición, el plan se pondría en marcha.

1....2......3..... ahora
Susurró en voz baja la hembra, y comenzó el plan, sacó sus garras y con unos pocos quejidos por el dolor se arañó el hombro bajando poco a poco hasta llegar a la mitad de su pata, inclusive algunas lágrimas salieron de ella por el ardor que sentía pero se aseguró de que la sangre escurriera y que la herida no le impiediera tanto el caminar.

Se acercó al árbol y comenzó a rasguñarlo mientras gritaba por ayuda desesperadamente.

Rafiki!!, Rafiki!!, ayúdame por favor
La hembra sabía que en cualquier momento el viejo mandríl saldría, la voz y el sentimiento no era sufuciente para convencerlo así que apretando fuértemente los dientes, desenfundó sus zarpas y las clavó ahora mas profundo en su hombro hasta bajar al mismo lugar que la anterior vez, eso le dió un poco mas de "valor" para disimular todo eso.

¿Y SI ALGUIEN MUERE, QUE HACES?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora