I knew you were trouble

ALL TO WELL

El gran día había llegado, todos sentían nervios. Estaban ultimando detalles sobre las presentaciones que harían, Stef y Minerva terminaban los detalles de cada prenda que usarían. Agustín y Gastón se aseguraban de que cada guitarra o bajo esté afinado. Agustina y Renato pensaron en como debería ser la presentación y algunos detalles que decirles a los productores. Pepo les había prestado su estudio para que pudieran ensayar, era más grande y cómodo para ensayar. Además así no había posibilidades de que Oriana pudiera espiarlos.
Renato estaba en la sala de ensayos, tenía una guitarra acústica en sus brazos y a su lado su cuaderno, donde escribía sus canciones. Muchos tachones se podían ver en el cuaderno, Renato quería que todo fuera perfecto y que cada palabra transmita exactamente lo que sentía. Le dieron ganas de ir al baño, se levantó y salio de la sala. Sintió un escalofrío en su espalda, como si alguien lo observara, volteó pero no vio a nadie.
Unos segundos después de que Renato se fuera, Oriana asomó la cabeza, como vio que no había nadie se metió en la sala de ensayos. El cuaderno de Renato estaba sobre el teclado. Oriana tomó el cuaderno y sonrió al ver el contenido.
-A ver que puedo cantar de acá -dijo tomando fotos con su celular de las canciones de Renato.
Renato fue al baño e hizo sus necesidades, al salir se cruzó con Agustín, quien le dijo que había una sorpresa en el lobby para todos. Los chicos se dirigen hacía el lugar y Renato se sorprende al ver de espaldas a su madre.
-¿Ma-mama? -dijo Renato, Valeria volteó al escuchar a su hijo sonriente. Renato prácticamente corrió a abrazarla. Necesitaba un abrazo de su madre desde hace un tiempo.
No subo si la abrazó, segundos, minutos o horas. Perdió la noción del tiempo. Aunque Valeria no sabía el motivo, sabía que su hijo estaba necesitando un abrazo de ella. Ya luego averiguaría que sucedió.
-Pudiste venir -dijo Renato.
-No iba a perdermelo por nada del mundo hijo -dijo Valeria. -Soy su fan número uno -se escuchó un carraspeo. Era la madre de Agustín: Nancy.
-Perdón pero ese puesto es mío hermana -dijo Nancy en broma.
-¿Nadie va a saludar a este viejo? -dijo el Abuelo de Renato.
-Claro que si abue, vení acá -dijo Agustín acercándose al hombre y lo abrazó. Renato se acercó a ambos y el hombre mayor abrazó a sus dos nietos. -Mis nenes, estoy muy orgulloso de ustedes. Sabía que iban a llegar lejos. Sigan así -dijo el hombre. Renato sintió algo raro, miró interrogante a su abuelo. El hombre solo le sonrió, su nieto era muy perspicaz. -No es momento querido -dijo el hombre mientras daba un pequeño golpecito con su índice justo en el centro de la frente de Renato, una muestra de cariño que tenía su abuelo hacía sus nietos. Renato ignoró la sensación rara que tenía y disfrutó de la compañía de su familia.

Ángela buscaba a Renato, todavía rl chico no le había dicho que era lo que tenía planeado. Se moría por saberlo ya. Comenzó a buscarlo y que mejor lugar que por la sala de ensayos. Seguramente el castaño iba a estar ultimando detalles. Llegó a la sala de ensayos, al intentar ingresar la puerta se abre de golpe y Ángela cae al suelo.
-¡Auch! -se quejó Ángela. Levantó la vista y vio a Oriana saliendo de la sala. La pelirroja abrió grande los ojos. No se esperaba encontrarse a alguien cuando saliera.
-Estee mmm -intentó decir Oriana.
-¡¿Qué haces acá?! Este es el lugar de Renato y los chicos. ¿Viniste a espiar? -dijo Ángela encarando a la chica, aunque esta era más alta que ella. Oriana se acomodó el pelo detras de la oreja.
-Yo no tengo que darle explicaciones a nadie. Igual si te interesa, vine a saludar y desear suerte, pero como no había nadie me estoy yendo. -dijo Oriana.
-No te creo nada. ¿Que hacías? ¿Viniste a sabotear a los chicos? -dijo Ángela.
-Pensa lo que quieras. Yo me voy -dijo Oriana intentando irse. Ángela la tomó fuerte del brazo. -Sol- tame -ordenó Oriana.
-Me llego a enterar que hiciste algo para perjudicar a los chicos, y te juro que voy a hacer lo imposible para exponerte y que todos se den cuenta de la rata inmunda que sos -dijo Angela. Oriana forcejeo para intentar zafarse. Comenzó a darle golpes a Ángela para que la soltara.
-¡Dale soltame! Tengo cosas mas importantes que hacer -dijo Oriana.
En el forcejeo hicieron un escándalo que hizo que Renato y Agustín llegaran y se sorprendieran al ver a Ángela agarrando a Oriana del brazo y Priana agarrando de los pelos a Ángela, la pelirroja intentaba huir del lugar pero Ángela la retuvo hasta que Oriana comenzó a estirar de su pelo más fuerte y en un impulso Ángela la soltó y le dio una fuerte cachetada en la cara. Agustín y Renato se taparon las bocas pero estaban algo emocionados, intentaban cubrir sus sonrisas. Oriana miró enojada a todos y se retiró del lugar.
-¿Te puedo abrazar? Cumpliste mi sueño -dijo Agustín. -Esa chica necesitaba que alguien la ubique -
-Admito que si. Pero pobre Oriana, va a tener que salir al escenario con tu mano marcada Ange jajaja-dijo Renato. -Pero... ¿que hacían aca? No me digas que...-
-Te estaba buscando y al querer entrar a la sala de ensayos me encontré con ella. No se que hizo ahi dentro pero...-
-Mi cuaderno -dijo Renato entrando de golpe a la sala de ensayos. Buscó y encontró su cuaderno justo como lo había dejado. Parecía estar todo en orden.
-Parece que esta todo bien, no falta ninguna canción ni esta rayado en nada -dijo Renato.
-Con Oriana nunca se sabe primo... nunca se sabe. Debe tener algún plan -dijo Agustín.
-No importa. No hay que preocuparse de eso esta noche. Hoy tenemos que ronperla si o si. Ángela vení que te explico lo que vamos a hacer -dijo Renato confiado.