Capítulo 73 Harry

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Liam y Lynne durmieron durante toda la debacle de Zayn. Acababan de correr por la playa cuando despertaron con los últimos disparos. Me sentía agradecido. Habían sido dos personas menos por las que preocuparse cuando todo sucedió.

Llegamos a la casa de papá y todo el mundo protestaba sobre por qué no llamamos antes de camino a casa, por qué no habíamos venido a casa aun cuando eso los hubiera puesto a todos en peligro. ¿Por qué, por qué, por qué? Les expliqué que era el Campeón. Que manejaba las cosas del modo en que mejor entendía para proteger a mi familia de la situación. Mamá lloró, Gran sonrió, papá me palmeó la espalda y me dijo que se sentía orgulloso de mí.

No podía creerlo.

Así que llamamos a todo el mundo. _______ llamó a Ele y le dijo que ya no había moros en la costa. Ella todavía no le hablaba, y le colgó justo después. Así que _______ llamó a su padre y le dijo que todo había pasado. Él se encontraba bastante enojado, y dijo que iba a tomar al primer vuelo a casa.

Esa noche, todos miramos las noticias cuando Ele y sus padres fueron reunidos en televisión nacional. Ele dijo que se habían perdido y que justo ahora eran capaces de regresar a casa. Hubo alguna especulación sobre por qué habían huido y acobardado, pero aún así, estaba en todos los titulares, puesto que existían muchas partidas de búsqueda para ellos.

El consejo convocó a una reunión, diciendo que _______ y yo estábamos exponiendo a los humanos a menudo y con facilidad, y que necesitábamos entender las ramificaciones de nuestras acciones. También amenazaron con revocar mi estatus como Campeón. Supieron de Ele a través de las enredaderas de chisme de los Ace, y no se encontraban muy contentos de que ahora no sólo mostrásemos nuestras habilidades a un humano, sino que encima escondiéramos a ese humano de Zayn. Pusieron una fecha para dos meses en adelante y dijeron que, Vidente o no Vidente, todos seríamos responsables por nuestras acciones. Y pensaban incluso en restaurar de nuevo la regla sobre los miembros del consejo viviendo en el palacio. Dijeron que les daba a todos un sentimiento de orden que no podría ser conseguido cuando no existía un gobierno uniforme.

Así que las cosas no habían cambiado tanto como pensé con anterioridad. La visión que _______ tuvo de nosotros luchando siendo mayores, la misma donde nos alzábamos juntos contra las masas; eso parecía que todavía era algo que tendríamos que esperar. Pero estaba bien. Mientras estuviéramos juntos, lucharíamos por los cambios que necesitaba nuestra raza.

A la mañana siguiente Jen y _______ dijeron que necesitaban salir a comprar cosas personales, así que me mordí la lengua cuando se marchaban, junto con mamá, y me quedé y empaqué el resto de mi habitación. Estaba casado, y esta habitación ya no era mía, aunque mamá tenía algo que decir al respecto. No se sentía entusiasmada con que me llevara mis cosas, pero dijo que arreglaría la habitación como un cuarto de huéspedes, que éramos bienvenidos a quedarnos cuando quisiéramos.

Más tarde, esa misma tarde, Bish finalmente pudo llevar a Jen a su nuevo hogar. No fuimos con ellos. Quería que lo experimentaran por sí solos, aun cuando él nos invitó para que fuéramos. Era el cumpleaños de _______ y todo lo que quería era llevarla a casa. No parecía interesada en una fiesta, así que mis padres y mi familia le dieron cosas pequeñas antes de marcharnos, y entonces nos fuimos con las cosas empaquetadas, y Bella en el asiento del pasajero junto a _______, hacia mi apartamento.

Ese pequeño lugar ahora tenía un significado diferente para mí. Iba a llevar a mi esposa allí.

Así que salí y corrí hacia su lado. Bella saltó, y _______ soltó una risita cuando la tomé en mis brazos, la cargué todo el camino escaleras arriba, y jugueteé con la llave para abrir la puerta. _______ eventualmente solo movió la cerradura desde dentro con su mente y entramos. No debía haber estado prestando tanta atención, porque cuando la cargué y crucé el umbral, nos recibió un coro de ¡Sorpresa!

Salté y luego me reí cuando vi a Vic a la vanguardia.

—¡Sorpresa, hombre! —dijo, riéndose—. ¿Y desde cuándo te casas y no me lo dices?

—Desde que nos escapamos —le dije y puse a _______ en el piso—.

¿Quién te lo dijo?

Me sonrió. —¿En serio creíste que Ashley se iba a guardar eso para sí sola?

—Oh cierto. Bueno, ¿cómo sabían que veníamos?

—Liam —dijo y se rió en mi cara—. Dijo que me enviaría un mensaje una vez que ustedes estuvieran en camino.

Sacudí la cabeza y miré alrededor. Se veían cinco sandías alineadas en la meseta. Rodé los ojos, pero le seguí la corriente. Nos obsequiaron un montón de cosas, y pedimos cerca de veinte pizzas para alimentar a todo el mundo. Colgaron serpentinas y globos desde el ventilador de techo a las lámparas. Era bastante gracioso. _______ pudo conocer a toda la gente con la que terminé pasando el año durante el curso escolar. El equipo de natación completo se hallaba aquí, y el resto eran personas al azar que conocía.

Antes de saberlo, ya miraban en YouTube los encuentros de natación. Gruñí y gemí mientras vitoreaban y se reían ante mi miseria.

Luego pasaron un par de horas y los envié a todos a casa. Vic fue el último en marcharse, y me sacó por la puerta, diciéndome que pensaba que estaba completamente loco por casarme, preguntándome si ella se encontraba embarazada. Le dije que no y me tomó un poco de trabajo convencerlo, pero pensó que _______ era adorable y dulce. Dijo que se sentía feliz por mí y que eso era todo lo que me importaba al final del día.

Cuando regresé adentro, _______ limpiaba. Bella se comía la pizza que alguien dejó en un banco. Alzó la cabeza con culpabilidad antes de bajarla lentamente para terminar el pedazo. Me reí de ella. Entonces tomé el brazo de _______ y la aparté de la bolsa de basura. —¿Qué estás?

—Eso puede esperar —le dije, mi voz baja y peligrosa. Intenté respirar, pero me iba volver loco si no conseguía tener a _______ a solas. Y ahora mismo nos encontrábamos definitivamente solos.

Me sonrió cuando la llevé al baño y me quité la camisa antes de ayudarla con su blusa. Abrí el agua caliente para relajarla y calmarla.

Había pasado por mucho, casi tocando a las puertas de la muerte justo el día anterior. Cuando recorrí sus costados con mis manos, sentí la cicatriz donde la bala intentó llevársela de mi lado. Caí sobre mis rodillas y la besé.

Puso una mano sobre mi cabeza y esperó. Cuando estuve seguro de que me encontraba despierto y que no era un sueño, me levanté y la besé en la boca como si no hubiera nada más que quisiera hacer en el mundo. Pasó su pulgar sobre la cicatriz en mi estómago y cerró los ojos con fuerza a los recuerdos que venían con eso. Amasé la piel de su espalda y hombros, esperando que viera que ni las armas ni la muerte podían apartarla de mí. Hizo un ligero sonido al relajarse y recostarse en mí, pero entonces gruñó contra mi boca y cambió el juego completamente.

Su espalda golpeó el azulejo de la ducha. La sentí abrirse paso en mi mente. Se lo permití, de hecho, vitoreé a recibirla. Cuando la puerta de la ducha comenzó a repiquetear, abrí los ojos para encontrarnos rodeados por cintas, y mi baño estaba a punto de explotar como lo había hecho el de California. Ella se mordió el labio con culpabilidad, pero simplemente me reí.

—Vamos. —La saqué de la ducha y la envolví en una toalla mientras le susurraba—: Trabajaremos en eso.

Sonrió cuando la cargué y la llevé a la cama. Por primera vez no presioné sus brazos sobre su cabeza en la cama mientras penetraba en su mente. La dejé tocarme y le rogué que lo hiciera. Se hundió en mi mente con felicidad mientras estábamos unidos en todos los modos posibles. Los rumores eran cierto; hacer el amor y mutualizarse juntos era mágico de por sí. No era como nada, indescriptible, pero lo mejor era lo libres y en paz que nos sentíamos. El lugar podría haberse incendiado y nunca nos hubiéramos enterado. Consumidos, contentos, casados, y juntos. Esto era todo lo que significaba ser el uno para el otro.

Finalmente.

Por siempre.

Mía.

Atando Cabos (Harry Styles y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora