Sangre oscura

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Cierro mis ojos y sueño que me besas, levanto una mano para poderte acariciar y juntos nos movemos al ritmo de una balada, disfrutándola lentamente. Ambos no queremos que acabe el momento pero mientras el sonido que hace eco en el lugar se desvanece, nuestros cuerpos se separan y dejamos de ser uno, todo lo que hay en este mundo ya no es de nosotros, caminas dándome la espalda y trato de buscarte mientras mantengo los ojos cerrados pero cuando intento tocarte desapareces y tu voz me susurra que todo es un sueño, abro los ojos y tus palabras se convierten en realidad. Nada fue real.

Alexby, un justo ciudadano ejemplar había entrenado mucho para poder pertenecer al cuerpo de policías y tomar un lugar respetable. Pero él nunca se esperaría que un joven de su misma edad tuviera la misma idea para su entrenamiento.

-Oye Alesby ¿comemos algo juntos?

-Mi nombre es Alexby y no se me apetece nada,gracias.

Era evidente incluso para el pequeño policía que no ganaría un puesto mayor que su fastidioso compañero, pero aún así seguía día a día laborando tranquilamente por la ciudad de Karmaland.

Millones de deseos pediría Fargan para poder volver a su hogar, volver a abrazar a sus padres, pasear con su viejo perro y correr por aquel bosque tan singular. Pero él sabia que eso no era posible, había escapado gracias a su padre y después de la masacre solo corrió sin mirar atrás olvidándose de todo aquello que le daba razón a su vida. La sonrisa en su rostro jamas se apago ni lo haría por mucho tiempo, nunca pensó en suicidarse o matar a alguien, solo necesitaba volver a empezar y cuando creyó que todo estaba perdido una mano lo ayudo a levantarse.

-No todo esta acabado para ti-una voz confiable le hablo-solo debes seguirme y confiar en mi.

Willyrex tomo con sus heladas manos el rostro dañado por el invierno de Fargan y lo invitó a quedarse en Karmaland,su nuevo hogar.Pero la vida da giros inesperados y esto obligó a ambos a ponerse túnicas negras para ganarse la vida gracias al temor de los más débiles. Fargan jamas pensó en ser policía, no obstante sabía que debía de proteger a Willyrex  y por eso se preparó para entrenar día y noche sin descanso alguno.

El cazador llegó al lugar acordado a pesar de la intensa lluvia que había comenzado hace poco. No pudo evitar soltar una sonrisa al ver un perfil reconocido, ya había pasado una hora de tardanza pero su "rey" aún estaba ahí esperándolo debajo de un árbol de limones.

-Una hora tarde, como siempre Doblas- dijo de una manera despreocupada.

-Debiste irte, te enfermarás si sigues aquí.

-Sabia que vendrías, por eso no lo hice, ¿Acaso estas tontito?-dijo como una sonrisa picara como solía hacerlo.

Rubius aún no entendía porque aquel hombre siempre estaba ahí cuando sus pensamientos se nublaban. Cada vez que sus hermanos de la hermandad oscura lo incitaban a hacer cosas peligrosas haciendolo caer lentamente en las garras del mal, su "rey" siempre estaba a la vuelta de la esquina para conversar con él y despejarlo de aquellos pensamientos de corrupción.

- Doblas, caminemos juntos hasta mi casa.

-Bien.

Ambos  caminaban debajo de la lluvia que caía impacientemente por sus rostros, caminaban uno al lado del otro y aunque no intercambiaran palabras sabían que todo estaba bien, se tenían el uno al otro y no hacia falta nada más.

No muy lejos de ahí los dos hermanos de la hermandad se debatían que hacer con la joven asustada que habían secuestrado. 

-¿Por qué ese niño nos dejó con el problema aquí, mientras él se va a jugar con ese bastardo?

-Tranquilo hermano, guarda los celos para después-dijo Fargan con poco animo en la voz.

Fargan desde que conoció a Willyrex se dispuso a protejerlo de cualquier cosa, su amistad era lo que más atesoraba en la vida y estaba dispuesto a ir hasta el infierno por él.

-Mejor vete, no puedes mancharte las manos ahora que tienes un trabajo importante, yo me encargo.

-¿Estas seguro de eso?

-Nunca había estado más seguro de esto.

Fargan no queria marcharse, quería acompañarlo, ser un complice de sus fechorias, compañero de matanza, un amante secreto pero sabía que Willyrex no lo dejaría hacer esto, porque no era lo suficientemente apto como para mancharse las manos de sangre junto a él.

A partir de ahora habrán algunos capitulos que narren acontecimientos pasados en Karmaland para luego retornar con Auron y Luzu.





Otra vida a tu lado (karmaland)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora