Kasha una chica de 17 años encuentra el amor, pero no es un amor imposible como cualquier otro, Kasha es lesbiana y su amor es una chica tímida y 100% heterosexual. ¿Que harías si estuvieras a punto de morir? seguirías luchando por enamorar a alguien imposible, o te rendirías. Mientras Kasha intenta sobrevivir en un mundo de depresión y autoflajeo, buscara la manera de enamorar a su chica. Hasta su último día de vida, Kasha dará el todo por el nada para encontrar el -Algún día- que le ah prometido su chica imposible.
-No, no te vayas quédate conmigo Kasha...-Susurro Yannick mirando atreves de la ventana.
Capitulo Uno.
El espejo está un poco sucio, creo que esta noche si lo limpiare, no mejor lo dejo así Deb dice que mientras menos me mire mejor están las cosas ya que soy el más horrible adefesio sobre la tierra, bueno yo le creo es mi mejor amigo llevamos más de 4 años juntos. Desde el día que Sue me lo presento somos inseparables él está conmigo todos los días de mi vida siempre susurrando en mi hombro lo que es verdad, cosas como << —Eres una buena para nada—>> < —Nunca haces nada bien—>> Es muy parecido a las cosas que me dice mi madre con la única diferencia que Deb es mi mejor amigo por siempre. Mientras tomaba mis cosas para regresar al infierno y con infierno me refiero a la escuela me daba cuenta que Deb si tiene razón soy un feo adefesio mi cabello que es de color verde estaba recogido en una cola de caballo despeinada también me miraba los pies tenía puestos unos tenis desgastados y muy sucios siempre decía la otra semana los limpiare pero nunca llego la otra semana porque por lo que me estoy dando cuenta los zapatos de los que viven en la calle son más limpios que los míos.
— ¡KASHA! — Grito mi madre desde el piso de abajo —.¡MALDITASEA BAJA YA.
Sabía perfecta mente que se me estaba haciendo tarde para ir al infierno, me mire en el sucio espejo por última vez no estaba conforme con mi cuerpo gordo ni con mi tez pálida, con las venas moradas resaltando casi todas las partes de mi cuerpo.
<<—Aunque la mona se vista de seda mona se queda, lo sabes verdad Kashi—>> murmuro Deb sonriendo de oreja a oreja desde el lado oscuro de mi habitación y por lado oscuro me refiero al closet de mi habitación donde Sue apareció por primera vez en mi vida.
—Lo sé.
<<—Me alegra saber que personas como tú aceptan las cosas como son—>>
Asentí con la cabeza y abrí la boca para responder pero mi madre entro en la habitación con un camisón que tiene desde que se casó con mi padre, es bueno saber que ella conserva algo de papá porque desde que mi madre lo saco de la casa, todas sus cosas salieron volando por la ventana del segundo piso incluyendo la lavadora que papá le había regalado por el día de la madre.
—Mierda, Kasha que tanto te miras en el maldito espejo, se hace tarde para que te largues ya a la escuela ¿Qué tanto te miras?
Me puse a pensar mi madre tenía razón ¿Qué tanto me miro? O mejor dicho en que tanto pienso.
—Ya voy mamá… —Murmure no me gustaba hablar con nadie soy la típica chica que va por la vida diciendo cortas palabras para que la gente no crea que soy molesta me gusta ser invisible.
— ¡VETE YA!
