Extra 12 (1).

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Qi Yu creció gradualmente, dejó de ser una pequeña bola rosa y tierna, y comenzó a enseñar sus dientes de pequeño demonio. Cuando cumplió cinco años, su notoriedad era conocida por todo el palacio, era enérgico y había aprendido a hacer maldades en cuanto aprendió a caminar. Era como si un dragón y un tigre pelearan todos los días, iba a las residencias a levantar los azulejos del suelo cada tres días y a cada rato molestaba a cualquier hombre o mujer que se encontrara. Ya había recibido varios sobrenombres como pequeño demonio y pequeño tirano, haciendo que los habitantes del palacio vivieran aterrados de todo y hablaran en privado sobre la molestia que era.

Shen Yu se sentía miserable todos los días cuando escuchaba los llantos y quejas de la gente del palacio, el pequeño abusador no tenía miedo a los entrenamientos, era muy hábil peleando y sabía fingir muy bien, admitiendo sus errores y jurando sinceramente que no volvería a portarse mal.

Cuando le llamaba la atención, su rostro lucía completamente inocente como el de un animal indefenso pero, en cuanto Shen Yu se daba la vuelta, comenzaba a causar problemas de nuevo.

Temprano en la mañana, Qi Yu estaba en el estanque del Jardín Yu pescando peces Koi, listo para rostizarlos y comérselos, cuando Shen Yu lo encontró, lo agarró de la oreja y se lo llevó de regreso. Después de dejar que los sirvientes le cambiaran las ropas mojadas, el niño se quedó parado escuchándolo y Shen Yu lo miró con amargura. Sabía que aunque le secaran las ropas, Qi Yu no le estaba poniendo atención y no tenía caso que le dijera nada.

"No iras mañana al campo de entrenamiento."

Jun Xuan Xiao llevaba a Qi Yu al campo de entrenamiento desde que tenía tres o cuatro años, ahí jugaba montado en un caballo. Conforme había crecido, aprendió a usar la espada, lanzas y alabardas, tenía una gran fuerza innata y era capaz de levantar incluso las espadas. Las armas que eran muy largas o muy pesadas para él, Jun Xuan Xiao había ordenado que las hicieran a su medida para que pudiera aprender a usarlas. Las personas en el campo de entrenamiento lo llamaban Mago del cielo e incluso Jun Xuan Xiao no dejaba de elogiarlo. Pero, era principalmente por el hecho de que entrenaba con su padre el emperador, que era tan malcriado.

"¿Qué? ¿Por qué?"

Qi Yu comenzó a asustarse cuando escuchó que sería castigado y no tendría permiso de ir al campo de entrenamiento.

"Es momento de te enfoques en otras cosas, sino te vas a convertir en un salvaje." Shen Yu lo estaba castigando de manera calculada. "Mañana, irás a la Academia."

"¡No! No iré a la escuela, iré al campo de entrenamiento."

Los pequeños ojos de Qi Yu se enderezaron y se acercó a jalar la mano de Shen Yu.

"Papá, buen papá, no me mandes a la academia, ¿de acuerdo? ¿De qué sirve leer esos libros? Yo pelearé al lado de mi padre el emperador para defender el territorio."

"Son estu..."

Shen Yu casi dice una mala palabra pero, afortunadamente, se la tragó a tiempo.

"¡Tonterías! Ahora la dinastía está en paz, ¿qué batallas vas a pelear?"

"Mi padre el emperador dijo que cultivar a un soldado requiere mil días, que no se debe abandonar el entrenamiento." Qi Yu habló seriamente.

Shen Yu le dijo. "Que te quede claro, no tiene caso que uses esa actitud tierna, ¿crees que no conozco tus ojos maliciosos?"

Shen Yu le agarró la punta de la nariz, ya no podía engañarlo con su actitud adorable. Qi Yu se dio cuenta de que no lograba nada y su actitud cambio inmediatamente, la apariencia sumisa desapareció de su rostro.

Silent lover (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora