Extra 21 (10).

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 Li Qing observó mientras el pequeño demonio se guardaba las hojas en las mangas y no se atrevió a decir nada.

"¿Por qué me miras de esa manera? Sólo te las voy a guardar, cuando las quieras te las devolveré." Qi Yu se dio unos golpecitos en el pecho y le dijo. "De verdad."

Li Qing se encogió de hombros, ¿acaso tenía caso echarle en cara la mentira?

"Me voy a casa."

"De acuerdo, vámonos."

Qi Yu se acercó a Li Qing y lo jaló, Li Qing trató de detenerlo pero de repente sintió que algo le rosaba el rostro, sintió una mordida en la mejilla y ¡sus labios fueron acariciados con la punta de la lengua!

"¡¿Por... por qué estás haciendo esto de nuevo?!"

Qi Yu se lamió los labios y le dijo vagamente. "Tenías restos del pastel de osmanto en la boca y te lo limpié."

"Sólo tenías que decírmelo, ¿por qué me lo limpias con la lengua?"

"No me desagradas, ¿yo te desagrado?" Qi Yu puso sus labios en los de Li Qing y dijo. "¡Saben dulces!"

"Claro que saben dulces por el pastel."

¿Acaso ese abusador era tan descarado? De verdad era un completo descarado.

"No es cierto, comí de ese pastel hace rato y me cansé del sabor rápidamente, ¿acaso el pedazo que te tocó a ti era más dulce?"

"Sólo estás diciendo tonterías."

Li Qing estaba demasiado cansado como para hacerle caso, Qi Yu sacó otro pedazo de pastel de osmanto del paquete y se lo dio.

"¿Qué estás haciendo?"

"Prueba otro pedazo."

Li Qing no entendía por qué estaba haciendo esas locuras pero no podía resistir la tentación de comer ese postre y se lo metió a la boca, Qi Yu saltaba de la emoción.

"¡Oye, oye, oye! ¡No es así! ¡Sólo comételo normal! ¡Déjame un poco cerca de tu boca!"

"Yo... no."

Li Qing tenía miedo de que le robara el pedazo de pastel, comenzó a masticar y sus palabras no fueron claras. Los ojos de Qi Yu brillaron con urgencia, temía que se tragara el bocado, se sentía un poco mareado. Se aventó y empujó la cabeza de Li Qing hacía abajo, puso sus labios en los de él forzándolo a que abriera la boca y con su lengua agarró un pequeño pedazo del pastel.

"Oye, oye, resístete." Qi Yu habló lleno de orgullo. "Sabe dulce, ¡sabe dulce! ¡Ese es el sabor! ¡Ja, Ja!"

Li Qing se quedó congelado e incluso se había olvidado de masticar. "Tú..."

"¿Qué? Viendo como comías, no pude soportar no probarlo, fue muy rico."

El rostro de Li Qing lucía aturdido. "Pero lo estaba masticando."

"Hiciste que tuviera un sabor más dulce."

"Yo..." Li Qing se sentía asqueado de él mismo. "... y además tenía mi saliva..."

Qi Yu se quedó pensando. "¿Por qué? Hiciste que supiera dulce."

De pronto se le ocurrió algo. "Ya sé, como generalmente lloras mucho, tus lágrimas desechan todo el sabor salado y amargo, sólo el sabor dulce queda en ti."

Silent lover (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora