R̶o̶m̶a̶n̶c̶e̶

10

—Ho, perdón no quería...bueno ya no tengo que preocuparme por qué deje embarazada a alguien verdad, ayy qué bonito tener un yerno tiene sus ventajas.

—¡¡MAMÁ!!!!...SAL DE AQUI!!!.

MIERDA...salió cerrando la puerta me quedé paralizado.

JungKook se metió a duchar por lo pegajoso que quedó, al igual que yo estábamos sudorosos tendríamos que vestirnos bien ya que saldriamos a cenar ya era un poco tarde...sería algo incómodo.

JungKook salió de su habitación  se veía realmente guapo y tierno a la vez estaba vestido de unos pantalones negros y pegados a sus muslos realmente fuertes y una sudadera que su gorro cubría su pelo estaban realmente avergonzado y yo bueno...una camisa blanca que se notaba mi cuerpo y unos pantalones iguales los dos decidimos ponernos cubre bocas.

—Se ven bien...bueno vamos.

Tenía todavía una sonrisa en su rostro.

Subimos al coche y no fijos ni una sola palabra en todo el camino después llegamos a un restaurante ya era tarde.

Bajamos y entramos...su madre pidió...a nosotros se nos fue el apetito.

—¿Todavía piensan en eso?.

Los dos dijimos que si mirando para bajo, tímidos.

—No se preocupen eso tan común que no me sorprende verlo... había llegado, creo que no me escucharón pero yo a ustedes si, quería ir aver que asían y me los tope...pero deben usar protección.

Lo decía como si nada con esa sonrisa tratando de que nos sintiéramos comodos como ella pero imposible, para nosotros era como...si hubiéramos pecado tan gravemente que nos iríamos al infierno, tenía razón era algo natural, ¡Era nuestra primer vez por favor!.

—Anden, pidan lo que quieran.

Pedimos algo del menú pero los dos queríamos pizza...ariamos mal gastar a su mamá ir aún restaurante y pedir pizza no era lo correcto.

Al terminar salimos y otra vez al coche era de noche.
Llegamos al parque, me estaba dando un poco de frío, no quería molestar...de pronto sentí unos brazos rodearme en mis hombros cubriéndome ya no tenía frio.

Los árboles cubiertos de luses se veía muy bonito mientras la mamá de JungKook explicaba.

—Este es el parque...pueden venir cuando quieran mientras están aquí por alla hay citios de videojuegos y en ese lugar venden mucha clase de comida.
..hay un parque de juegos pero esta un poco lejos un día iremos a pasar el rato.

Solo mirábamos tímidos pero nos agrado ya conocíamos cómo llegar y los lugares más básicos.

Llegamos a casa, la mamá de JungKook escojio su cuarto que era uno más antes despues del vacío, era el de JungKook el mío el cuarto básio y el de ella ¿Por que se alejo?, quizás no quiere escucharnos...bueno.

Estaba doblando su ropa quise ir a verla para disculparme por lo de la tarde.

—¿Se puede?.

—Claro Yoongi, ¿Que sucede?.

—Solo quería disculparme por lo de la tarde le juro que...

—Yoongi ya les dije que no se preocupen todo está bien no quiero que se sientan incómodos por lo que está señora metiche hizo, Yoongi estoy contenta de ver a JungKook felíz y no solo por eso... él está creciendo no disfrutaba salir a lugares cuando venía con migo no salía o decía algo simplemente estaba quieto como si no estubiera con migo...no ubiera querido que JungKook sufriera por nuestros problemas de su padre y míos...te agradezco mucho yoongi por hacerlo felíz a mi pequeño.

Era muy hermoso ver cómo se preocupaba por él, era tan comprensiva...tenía ganas de llorar.

Asentí me vio llorar y me abrazó no había sentido los cálidos brazos de una madre desde hace años desde que mi madre dejo de hacerlo.

Estaba en mi habitación no podía dormir...pensando muchas cosas, pero de pronto alguien me llamo.

-Yoongi por qué no me llamaste debiste a ver llegado en la mañana y ya es de noche a ya que paso?!

-Perdon Nam es que se me olvidó pero estoy bien la mamá de JungKook es muy amable y dulse con migo le agradó Nam me quiere mucho como yerno!!!.

-Bueno bien por ti a mí me costó que me aceptara ni suegra...pero ya que.

-Nam estoy cansado debo dormirme.

-Ho, es sierto descansa te hablaré el sábado pero el horario lo tomaré de acá.

-Esta bien adiós Nam saludame a Jin.

Colgué quería dormir pero no podía las doce y no podía.

Alguien tocaba mi puerta, ¿Quien sería a estas horas?.

—Hyung.

Eea mi mocoso.

—¿Que paso mocoso?.

—Hyung no puedo dormir.

—Yo tampoco...

—¿Vamos a ver una película a la sala quiere?.

—Esta bien vamos.

Bajamos a la sala yo me estaba empezando a sentirme cansado pero todo sea por él.

Estábamos en un sofá los dos acurrucados tapados con una sábana, me estaba quedando dormido en su cabecita me recostaba en ella asta que me quedé dormido.

Esperando un día más.