Eterno amor. ©

Capítulo 34.

*Capítulo anterior*

[ - Luna: Porque estás enamorada de Pablo y no podés sacarlo de tu cabeza

- Marizza: Yo? Pero pfff... Por favor, Luna. Mirá si yo voy a estar muerta de amor por ese tarado, antes me mato

Pero la realidad es que sí, Luna tiene razón. Yo a Pablo lo quiero con cada pedacito de mí corazón, lo quiero más que a cualquiera. Lo quiero como nunca quise a nadie.
Estoy enamorada de Pablo Bustamante, estoy hasta las manos, muerta de amor.

¿Qué podría ser peor que esto? ]

Marizza's POV

Sin darle mucha importancia seguimos con nuestras conversación, no quería admitir que si me importaba Pablo y que me dolía que esté de novio.
Les conté de Simón, de los besos que nos dimos y de la tarde hermosa que pasamos juntos, había sido un día hermoso si no fuese por la noticia de la pareja del año. Eso provocaba un sabor amargo al tragar, no podía digerir que estaban juntos.

Aunque, ¿Lo estarán realmente?

Yo tengo que comprobarlo, al menos ver que de besen y así sacar mis dudas. Necesito pruebas.

Salimos con Luji y Luna al baño, yo debía bañarme y ellas lavarse sus dientes antes de dormir. Llevé mi neceser con un pijama negro bastante corto, pero muy lindo y una toalla rosa.

Nos sorprendió ver qué había una ducha con la canilla abierta pero vacía. Que raro.

Las chicas se lavaron los dientes y yo me metí en esa ducha, ya que estaba abierta para qué desperdiciarla no?

- Luna: Marizza, nosotras ya terminamos

- Luján: Te esperamos en el cuarto

- Marizza: Bueno chicas, yo me baño y voy

Cesaron los gritos y yo me relajé bajo el agua caliente, la ducha estaba perfecta y hasta podría decir que es justo lo que estuve necesitando todo el día desde la noticia de Pablito y Solcito.

Puse shampoo en mi cuero cabelludo y comencé a darle masajitos lentos mientras sentía el agua correr por mi espalda. Removí todo el shampoo de mi pelo y puse Acondicionador, dejando suavidad en mi rojizo pelo. Estaba terminando de quitarlo cuando de repente se abre la cortina, salté del susto y tapé mis partes íntimas con las manos. Alguien estaba entrando de espaldas y al chocar con mi cuerpo desnudo se volteó y me miró de arriba a abajo.

- X: Qué haces acá?

- Marizza: Me estoy bañando nene, no es obvio? - dije mirando mis pies. - Vos qué hacés acá Pablo?

- Pablo: Yo vine a bañarme nena

- Marizza: Bueno, salí

- Pablo: No, por qué? Si yo me dejé la ducha preparada, vos te metiste - se mordió un poco el labio inferior.

El muy idiota miraba mi cuerpo descaradamente, no podría ser peor.

- Marizza: Qué me mirás así? Tu novia te va a matar estúpido

- Pablo: Sol no está acá, pero vos si - Sonrió maliciosamente

- Marizza: Y?

- Pablo: Que podríamos terminar lo que empezamos el otro día

- Marizza: A qué te referís? - dije con voz temblorosa

- Pablo: Me vas a decir que no te acordás? Mi amor

Sabía perfectamente a qué se refería, es lo que más quería hacer en este momento, pero no se podía. Yo estoy con Simón y él con la idiota de Sol.