Kookmin-Tokyo- ♡ OMEGAVERSE ♡

6

Jeon se había descuidado un sólo momento, había sido al baño pero al regresar. Se encontró con un Jimin totalmente quieto. Se extraño demaciado por que sólo hace unos minutos en la cocina le había hecho gestos "obscenos" pero ahora está completamente tranquilo.

Le dio poca importancia y se disponía a seguir con su película. Se sento,  miro de reojo a Jimin quien miraba las escenas con extrema fijación, pudoadmirar el perfil del omega. Sus mejillas abultadas, sus labios carnosos y rosados, su piel suave y sus rasgos suaves. Su delicioso aunque intenso por el celo, a fresas. Todo en el hacia vibrar el cuerpo, mente y alma del alfa. Poco a poco Jimin estaba aduelandose de cada parte de Jeon. Cada ves que le veía causaba ese efecto en el, Jimin no era como los demás omegas, eso estaba más que claro pero había algo mas halla que hacía que de entre todos, la vista de Jeon callera en el.

Jeon recosto su cabeza en el borde del mueble, cerrando los ojos un momento cuando... sin pensarlo, el omega se subió a sus piernas, poniendo sus rodillas a cada costado del alfa, lamiendo con delicadeza su cuello mientras romrroneaba. Pidiendo y duplicando por ser tomado por el. Jeon sorprendido le miro pero Jimin rápidamente le tomó del cuello, besandolo con pasión y necesidad. Dándose un pequeño lujo, Jeon se dejo llevar por las caricias del omega, sus labios eran como tocar el cielo, suave y esponjoso. Asi eran los besos de su omega.

Separándose de el un momento le miro directo a los ojos, esos ojos que gritaban lujuria pero podía sentir en ellos algo mas que eso, no era un esparto en cosas del amor pero sabía a perfección que Jimin le queria, por alguna extraña razón podía estar seguro que sus sentimientos eran correspondidos. Dio más volumen a la película cuya trama esa un musical y de un sólo movimiento dejo al omega debajo de si.

-¿Quieres que te toque?- paso su mano por la mejilla del más bajo, sintiendo como se erizaba por su tacto. Asintió repetidas veces. -Abre las piernas- ordenó.

Sumiso ante Jungkook,  Jimin abrió sus piernas mientras Jeon le devoraba a besos la boca. Los besos fueron bajando hasta el cuello del omega, besos que se convirtieron en pequeñas y jugetonas mordidas, causándole escalosfrio al sentir la húmeda lengua de Jungkook pasar sobre su piel. Las manos de Jeon jugeteaban por las caderas del rubio, apretando y marcandole a su paso, dejando en claro quien mandaba mientras los jadeos constantes de Jimin se incrementaban,  extaciandole y exitandole a cada roce que el alfa le causaba.

-No puedo tomarte completo pero te ayudaré a aliviar el dolor lindura- las palabras eran susurradas en el piso del omega con sumo cuidado, en un tono grave y fuerte como la voz de todo alfa ante un omega. Jimin le miro, dándole a entender que seguiría lo que el dijera. - No quiero aprovecharme de que estés así, además que se que me mataría si te llegas a acordar- sonrió -Asi que se buen chico y hazme caso lindura- Jimin asintió una ves más rodeando el cuello del alfa para besarle una ves más.

Jeon se posicionó sobre Jimin, abriéndose las piernas para poder sentirle más, sin dejar de besarle comenzó a simular embestidas aún con la ropa puesta. Su miembro, ya más que despierto comenzó a dolerle pero poco importaba, siguió con el delicioso roce que sus cuerpos hacían. Las manos traviesas de Jimin levantaron la camisa de Jungkook para después retirarla, dejando ver el trabajado abdomen que poseía, sus brasos fuertes adornados con los tatuajes que le hacían ver más sexy. Eso sólo logró alterar más las hormonas del omega. Volviendo a tomar posesión de los labios de Jimin, Jeon bajo una de sus manos a la orilla de la camisa que el omega llevaba como prenda.

Metió su mano y pudo sentir lo mojada, que la tela de las bragas de Jimin estaban ya. Sonrió para si entre el beso en forma de victoria. Sabía que tanto éxtasis era causado por el y sólo el. Rosoba punta de sus dedos por encima de la tela, una espalda curveada fue su respuesta al tacto en aquella zona tan íntima. Delicadamente jungkook retiró aquella braga, de color claro que adornaba la pelvis de Jimin, la piel de sus dedos tocaban la pierna de este mientras bajaba la prenda. Una ves fue retiradapudo admirar lo mojado que estaba el omega, con sus rodillas flexionadas y sus piernas abiertas, con su entrada desprotegida y el flujo saliendo de el, solamente para Jeon fue un paisaje que Jungkook se tomó el tiempo para guardar en su memoria.