Lo Ideal .- Jeon Jungkook, Park Jimin -.

13

La clase termino para dar paso al tan esperado receso. Jimin y yo nos encontrábamos en una de las mesas de la cafetería.

- ¿te sientes mejor, bonita?

Jimin sostenía mi mano sobre la mesa, era un acto sumamente lindo, pero si seguía así iba a llorar de nuevo.

- si Jimin, no te preocupes. Y gracias por querer ayudarme - le regalé la sonrisa más sincera que pude.

- vaya ayuda, termino regañándote más - su sonrisa se había borrado por un segundo.

- qué lindo tu color de cabello. Con todo lo que ha pasado ni siquiera te he dicho lo lindo que te vez... Pero que pecado - bromeé un poco para que su hermosa sonrisa volviera, pero no funciono.

En su rostro se formó un intento de sonrisa, más parecido a una mueca.

- ¿en serio lo crees?

En serio lo pregunta?
¿Por qué suena tan decaído?

- claro que sí - revolví un poco su, ahora, rubia cabellera.

- Cassi~ - Lo vi a los ojos en espera de lo que diría. - ¿Por qué estabas con Jungkook?

¿Qué? ¿Por qué la repentina pregunta?
Él se quedó mirando algo detrás de mí. Al voltear me di cuenta que se trataba de Jungkook con Madisson. Ella y sus demás amigos reían, Jungkook apartó la mirada en cuanto chocó con la mía.

- Cassi~ - volvió a llamar Jimin, con su melodiosa voz, yo volví mi vista a él.

Pensó un poco lo que diría, después de unos minutos volvió a mí y con una sonrisa agregó:

- yo te cuidare.

Seguido de eso toco la punta de mi nariz con su dedo lo cual me hizo sonreír.

- ¿cuidar de qué?

- de todo lo malo. Eres muy linda e inocente para este mundo.

¿En serio me cree tan inocente? Ya no soy una niña ¿Por qué no le puede quedar claro? Sus palabras me hicieron sentir una rabia inexplicable.

- me puedo cuidar sola - mi voz salió firme, con mis brazos cruzados en mi pecho, tratando de dar a entender mi punto.

- claro que sí, ven acá.

Jimin jalo de mí, desasiendo el nudo que formaban mis brazos y envolviéndome en un tierno y lindo abrazo. De repente toda la rabia y dolor desapareció en segundos ¿Cómo logra hacer eso? No resistí y respondí a su abrazo.

Nos encontrábamos de camino al salón donde sería nuestra última clase. Los pasillos se encontraban repletos de chicos buscando sus cosas para la siguiente clase.

- Cassi~

- ¿quieres ir al baño?

- ¿Cómo lo sabes? - Jimin me observaba sorprendido.

- cada vez que vamos por los pasillos y dices... Cassi~ - lo imite haciéndolo reír. - es porque quieres ir y no sabes cómo decirme.

- ¿me esperas aquí?

- claro, al menos que tardes una eternidad.

- no tardaré - seguido de decir esto, desapareció entre los pasillos.

Aunque llevemos poco tiempo de conocernos, yo muy poco tiempo de estar aquí, la mayor parte del día escolar me la paso con él. Eh aprendido muchas cosas, me gusta poner atención a lo que hace, a lo que dice y a lo que piensa. Es un chico muy interesante y un gran amigo.

Al darme cuenta, los pasillos ya se encontraban vacíos. No había absolutamente nadie y Jimin aún no regresaba.

Un fuerte golpe a mis espaldas me hizo darme vuelta. Alguien había cerrado con fuerza un casillero y ese alguien, era Madisson. Ella empezó a acercarse a mí con una mirada intimidante.