La hermana de Kai (Olli y tu)

1- Enterada

Pov Diana

Hoy llegue temprano a casa después de las clases, ya que nos han dado permiso de irnos porque los profesores tenían una reunión importante, pero la cosa es cuando llego a casa.

Como cada vez que llego temprano lo digo por teléfono, pero esta vez no lo hice y por esa razón me entere de que los que pensé que eran mis padres no lo eran. Estaban hablando entre ellos de que debían decirme la verdad de que era adoptada, de que alguien le hizo daño a mis verdaderos padres separándome de ellos. Pero al querer alejarme para irme se me cayo el móvil y me vieron, en ese momento se preocuparon, cuanto tiempo llevo allí escuchando y les respondí.

-Pues llevo un rato suficiente para saber que soy adoptada- dije con lagrimas en los ojos.

-Te lo íbamos a decir porque en una semana te iras con ellos- dijo "mi supuesto padre" que se note el sarcasmo, igual se les notaba que no me querían mucho.

-Pero también te íbamos a decir que estaba embarazada y que puedes elegir ir con tu familia biológica o ir al orfanato otra vez- dijo la mujer que pensaba que me quería.

-¿Tengo alguna otra opción?- dije un poco cabreada.

-No- dijeron al unisono.

-¿Mis padres biológicos lo saben?- pregunte con algo de duda.

-Si, pero viven en Alemania- dijo como si nada el señor, ya que no son nada para mi estas personas.

-¿Tengo que ir sola en el avión o iré con alguien?- volví ha hacer una pregunta.

-Sola, así que no hagas más preguntas y empieza ha hacer tus maletas y empaca lo demás te lo enviaremos por correo de mudanza- dijo la señora que se cree importante.

-Iré ha hacerlo, pero antes ¿podrían hacer algo por mi una ultima vez antes de irme de aquí?- dije y ellos asintieron- podrían ir a darme de baja en el colegio es que quiero ir empacando tranquila y al menos despedirme de vosotros ya que amigos no tengo-finalice.

-Claro, no te preocupes esta semana te dejaremos empacar tranquila y pasaremos algunas horas juntos- dijo el hombre almenos tienen algo de corazón.

-Gracias- y me fui para ir mirando que podría poner en la maleta y que no, pero menos mal que iba a clases de alemán sino no sabría que hacer y se me hacían muy fáciles y nunca supe porque pero ahora si. Pero bueno una semana pasa volando así que a empezar.

Una semana después

Estoy en el aeropuerto de Alemania saliendo por unas puertas y veo a unas personas con un cartel que pone Diana Sanchéz y a otras personas con ellos. Tome valor y me fui acercando a ellos, hasta que veo a una mujer que esta abrazando a un hombre y que este la esta intentando tranquilizar supongo de la emoción de poder conocer a su hija. Pero no llegue ni estar muy cerca de ellos porque nada más me vio esa mujer vino corriendo y me abrazo muy fuerte que hasta me levanto del suelo y eso que solté la maleta y tenia un bolso en el hombro derecho. Cuando vino el señor dijo que puede que no sea yo esa persona pero le interrumpir cuando pregunte por ellos.

-¿Son ustedes la familia Wolfermer?- la señora empezó a llorar más y me abrazaron esta vez los dos juntos, pero me costo un poco corresponder pero al final lo hice y se acercaron las demás personas para saludar, además de presentarse.

Después de eso nos fuimos a la casa a comer y me estuvieron haciendo preguntas, cuando todos ya estábamos sentados.

-Bueno Diana, ¿allí tenias muchos amigos?- dijo mi madre aun se me hace raro poder hacerlo.

-...Pues...emm...no- dije finalmente ya que no sabia si decir la verdad o no, pero al hacerlo todos me miraron raro.

-¿Y eso se debe a algo en especial?- dijo mi padre.

-Siempre estuve sola, tanto en casa como en la escuela. Pero al intentar hacer amigos me decían que era un bicho raro o me llamaban rata de biblioteca- respondí- pero nunca me importo, ya que si intentaban hacerme una broma yo se las devolvía peor-y al decir eso mi padre se empezó a reír y celebrar.

-No tendrás alguna foto de las travesuras que hacías, ¿verdad?- dijo muy curioso el padre de un amigo de mi hermano aguantando la risa.

-Tengo algo mejor- respondí buscando en mi móvil- aquí esta es un vídeo- se lo di con una sonrisa, cuando lo estuvo mirando tanto el señor como los demás no podían dejar de reír hasta mi hermano y sus amigos que me estuvieron mirado muy raro.

CONTINUARA...