DC XII:LA REINA DEL MUNDO √

45 - ¿QUÉ HACEMOS CON LORIE?

Cris

Al final la cosa ha ido mejor de lo que pensaba. Todos han entendido perfectamente nuestras motivaciones y parece ser que empiezan a aceptar a Fiona, sobre todo Rose. Está encantada con su nieta y con que sea tan parecida a ella.

La que me preocupa es Christen. No deja de mirarle de manera rara por lo que deduzco que no se acaba de fiar de ella. Voy a tener que hacer algo para que se llevan bien, pero ¿qué?

Cuando Nicolae nos ha contado que mi madre se ha llevado a Lucie con el medallón se nos ha caído el mundo a los pies. Por suerte, no soy tan inmadura como parece y, después de todo lo que sucedió con el libro de las sombras en el pasado, decidí proteger a ambos. El libro y el medallón están conectados a mí por lo que puedo recuperarlo en cualquier momento. El problema es rescatar a Lucie. Seguramente se la hayan llevado al castillo de Hades y no va a ser fácil acceder de nuevo allí.

—Hay algo que me preocupa —dice Viktor —. Habéis sacado a Fiona de allí y ya se habrán dado cuenta. ¿Por qué no han venido a por ella?

Drogo y yo nos miramos y sonreímos satisfechos.

—No se han dado cuenta de nada —responde Drogo orgulloso.

—¿Pero cómo? ¿Acaso habéis creado una ilusión?

—Mejor que eso —contesto —. Nicolae. ¿Recuerdas el recipiente que creaste para la piedra filosofal?

Él asiente e inmediatamente abre los ojos como platos.

—¿No me digas que...?

—Exactamente —respondo satisfecha —, conseguí el conjuro. No convierte las cosas en oro, pero crea unos clones preciosos.

El estupor inicial da paso a una gran carcajada mientras que yo me echo para atrás el pelo orgullosa. No puedo evitarlo. Soy genial.

—O sea, que habéis dejado un clon de Fiona —concluye Tiff.

—No sólo de Fiona —le indica Drogo —. También de Lorie y de Alicia.

—¿Lorie? ¿Alicia? ¿Están aquí? ¿Pero es que os habéis vuelto locos? —nos reprende Camile nerviosa.

—De ninguna manera —se defiende Drogo —. Lorie es mi hija y no podía dejarle allí. En cuanto a Alicia... Pensé que nos vendría bien como seguro y, visto lo visto, tal vez podamos cambiarle por Lucie.

Me levanto a servirle una copa al hombre tan maravilloso e inteligente que tengo por marido. La verdad es que en estos momentos no podría sentirme más orgullosa de él.

—Vale, pongamos que así recuperamos a Lucie —interviene Tom — Pero ¿el medallón?

—Tranquilo. Yo me ocupo de eso —respondo orgullosa.

—Después de lo de la piedra filosofal, ya me creo cualquier cosa de ti —comenta Nicolae haciéndonos reír.

De repente un gruñido resuena en mis tripas provocando a partes iguales risas y asombro.

—Ahora te traigo patatas fritas, Cris. Te las has ganado.

Le dedico una sonrisa de agradecimiento a Nicolae. Con todo el jaleo, ya me había olvidado hasta de comer.

—¿Y qué habéis hecho con ellas? —pregunta Camile con seriedad.

—Alicia está en las celdas y Lorie en su cuarto —contesta Drogo —. Y Cris ha lanzado unos fuertes conjuros para que no puedan usar la magia ni escapar.

Asiente satisfecha con la respuesta y yo sonrío. No le estamos dando motivos para echarnos la bronca y eso es bueno. Muy bueno.

—¿Y qué es lo que toca ahora? —pregunta Viktor.