Desastre En El Pentágono!

One shot

-Algun punto entre Mayo y Julio, 1963-

El secretario de defensa Robert Macnamara se encontraba caminando de un lado para otro, notablemente asustado.
El Defcon se había activado repentinamente, y todo el departamento de defensa estaba en pánico.

Habia papeles en el piso, muchas sillas tiradas sin razon aparente y un fu
erte olor a cigarro muy fuerte.

Podría ser que se tratara de otra crisis como la ocurrida en el 62'
Pero el teléfono rojo no había sonado, y los soviéticos tampoco respondían.

"Un ataque sorpresa?" la idea viajaba por su cabeza.

"Que demonios pasa afuera?"
Su pensamiento fue interrumpido por el tono del teléfono.

El presidente no respondía.

-Maldición!- Grito frustrado mientras hacia ademanes a algunos asistentes y científicos.

-Lograron contactar con la NSA?-
Acomodo sus lentes y corbata intentando calmarse

-No señor, no logramos recibir nada desde Maryland-

-Tch... Los ingleses?-

-Tampoco, parece que estamos completamente incomunicados-

-¿Cuanto tiempo llevamos en Defcon 1?- Macnamara sudo frío despues de preguntar eso.

-Exactamente 32 minutos con 21 segundos-

-A este punto las tropas deben estar deplegadas por todo el país y hasta en los dientes del invasor...- murmuró riendo.

- Q-que haremos señor?-

-No sabemos que demonios esta pasando y me preguntas que haremos!?-

En ese punto la cordura del secretario pendia de un hilo... Que estaba apunto de ser cortado.

-Señor!, no hay errores en los sistemas de los laboratorios subterraneos!-

Con esperanza de ser una amenaza interna Macnamara envío a un equipo a investigar los laboratorios del Pentágono... Por suerte o desgracia, no encontraron nada.

-Entonces no son zombies- Suspiro aliviado. Justo antes de cambiar su expresión a una de total decisión.

-Vamos a lanzar una bomba a Moscú- dijo con calma.

-¡QUEEEEEE!!!!!???- absolutamente todos gritaron espantados.

-No hay forma de saber lo que pasa en el exterior, el edificio esta sellado cuando una catastrofe ocurre... Justo como ahora-

-Asi que solo nos queda como opcion viable... ¡Volarlos a todos en pedazos!- Grito mientras corría a la sala de mandos emocionado.

Todos lo persiguieron intentando detenerlo, pues era la unica persona (aparte del presidente) que podría activar multiples bombas atomicas y de hidrogeno sin necesitar permisos y "las llaves".

-La la la 5 vueltas a 5 lados del pentagono con 5 caras!- dijo programando y confirmando los lanzamientos de las ojivas.

Todos estaban estupefactos, se había activado todo el Arsenal nuclear solo por no saber que demonios pasaba en exterior.

¿Y si habian sido simples hippies gastando una broma muy pesada?
¿O algun fallo en los sistemas del edificio? Claro estamos en los 60s no parece ser que la tecnología sea muy buena para confiar ciegamente en ella.

-Pero que demonios hiciste?!- Grito un cientifico armandose de valor y agitando a Macnamara.

Ahi fue cuando el secretario entró en razon y lo miro aterrado.

-Ahora... Ahora qué?- calló al suelo rendido.

-A esperar la destrucción mutua asegurada- Dijo otro resignado y sentandose en el piso.

En ese momento todos junto a el se sentaron en el suelo o recostaron en sillas, incluso algunos se tiraron sobre las consolas.

-Qué creen que haya...-  Macnamara fue interrumpido por el sonido del techo siendo totalmente destruido.

El humo y polvo no permitia distinguir que sucedia, asi que todos esperaron a que se despejara.

El tiempo paso y finalmente podian ver el cielo azul

Entonces divisaron un objeto gigante en el cielo, ahora eran dos, y luego tres.
Eran cientos de objetos voladores no identificados.

-A...-

-Aliens?- Macnamara porfin sonrió aliviado.

Fin