Romper las cadenas

11 2 0
                                    

El Escuadrón de Reconocimiento, había localizado su objetivo y estaban a punto de ingresar a la capilla, para realizar el rescate más épico de la historia. Tenían una gran desventaja en números, pero el plan no podía fallar.

Por otro lado, en subsuelo de la misma, Eren estaba despertando de un larguísimo sueño. No sabía cuanto tiempo había pasado, pero lo único que reconocía era el lugar en donde estaba, ya había estado allí antes. Miró a su derecha y allí estaba Gaia con su cabeza sangrando, levemente, demasiado pálida e inconsciente. Parecía muerta, pero respiraba. El dije que ella tanto amaba no se encontraba en su cuello, seguramente, se lo habían quitado cuando la dejaron allí.

-¿Eren? ¿Estás despierto?- le preguntó la pequeña Historia. Él sólo realizaba sonidos con su boca por la mordaza -Todo esta bien, sólo resiste un poco más. Escucha, mi padre siempre ha sido un aliado de la humanidad. Quiere salvarla. Hemos mal interpretado todos los crímenes que ha cometido por el bien de la humanidad-

Él no creía ni una sola palabra de todo lo que salía de su boca. Alguien había manipulado su mente y la habían hecho cambiar de opinión acerca del mundo.

-Historia, déjame explicar el resto- su padre y ella, subieron juntos la escalera hacia donde estaban ellos -¿Qué pasa? Es la primera vez que estás aquí- habló al joven maniatado -No sería extraño si recuerdas haberlo visto. Sólo tenemos que tocarlo, para despertar los recuerdos en su interior-

Padre e hija, tocaron la espalda desnuda del joven frente a ellos. Imágenes de recuerdos y vidas pasadas, llegaron a su memoria. Incluso llegó el recuerdo de como se había convertido en titán y había devorado a su padre.

Gaia estaba recuperando un poco de su débil conciencia, abrió sus ojos y observó la cara de horror de su compañero. No podía seguir despierta mucho tiempo, aún no sabía que le habían inyectado, pero era muy fuerte y el golpe en su cabeza, no ayudaba mucho.

-Eren...resiste...espera...a...Levi y a tus...amigos- murmuró y volvió a desmayarse.

En la entrada de la capilla, el escuadrón de Reconocimiento, estaba dando lo mejor de si. Habían cegado al enemigo con barriles de humo y bengalas, para poder adelantar hacia su objetivo, que era rescatar a sus compañeros.

-26...28...32- contaba el capitán -Son 35 los enemigos a enfrentar. Están sobre el techo y nuestros laterales- gritó a su escuadrón -No quiero a nadie muerto aquí, den lo mejor de ustedes...Vamos tras el enemigo- Exclamó -¡Maldición! ¡Todavía estoy enojado! ¿Kenny, dónde estás?-

El capitán junto con Mikasa y la líder Hanji, atacaban a diestra y siniestra a cualquier objetivo, para que no quedaran en pie. Hasta que la líder, fue atacada brutalmente por una soldado del escuadrón militar, quedando muy mal herida y al cuidado de Armin. El resto del escuadrón, siguió su camino sin retroceder, en ningún momento.

Todo tenía sentido para la pequeña Historia. Ella nunca estuvo sola, su hermana Freida cuidó de ella y le enseñó muchas cosas. Pero Freida murió y no la podía recuperar.

-Por fin nos deshicimos de todas las distracciones. Por suerte la alquimista sigue dormida, sino nos hubiera generado grandes problemas- mencionó revolviendo un pequeño maletín.

-Padre, ¿Qué es eso?-

-Lamento haberte hecho esperar tanto tiempo, Historia. Pero escúchame bien, tu hermana Freida y sus recuerdos aún viven ¿Te gustaría volver a verla?-

Eren había comprendido todo. Iban a inyectar a Historia con el suero productor de titanes y luego, lo devoraría para tomar su poder.

-Si- respondió ella.

Simplemente Magia O Puramente AlquimiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora