Capitulo 7.

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La tarde paso tranquila para Louis. El dolor seguía. Pero por lo menos estaba acompañado. 

Hablo con Liam de todo lo que había sucedido. Encontró consuelo en el y en su familia. Siempre lo hicieron sentir bienvenido y eso era algo que Louis agradecía enormemente, ya que lo trataban como uno mas de ellos y lo hacían sentir cómodo.

Llego la hora de volver a casa y su mejor amigo lo llevo en su auto, dejándolo en la puerta.

- Estas seguro que no quieres quedarte en casa?- Preguntó Liam con cara de preocupación.- Sabes que hay lugar y mis papas no tienen problema Louis.

- Ey, tranquilo - Respondió Louis.- Voy a estar bien, si necesito algo te voy a llamar. Gracias por todo.- se acerco a Liam y lo abrazó.- Ahora vete antes de que el clima empeore. 

Vio a su amigo asentir y alejarse. Eran cerca de las 10 de la noche. Para esa hora el clima cambiaba radicalmente y era difícil de soportar. 

Apenas cerro la puerta se dio vuelta y se dejo caer sobre un sillón haciendo que el mismo rechinara debido a su peso. 

Cuando empezaba a relajarse y cerrar los ojos escucho dos toques provenientes de la puerta que lo hicieron sobresaltar. Quizás era Liam que se había arrepentido y volvía para llevarlo.

Un poco confundido se levanto y camino hacía la entrada. Sintiendo el frío del piso en sus pies al estar descalzo.

Miro por la cerradura y no logro ver nada. La niebla había empañado la pequeña mirilla. Louis dudo un tiempo en abrir pero dos golpes mas lo sacaron de sus pensamientos. Se iba a arriesgar, después de todo no había nada que perder. Agarro la llave y giro el seguro. Cuando abrió y vio quien era se quedo helado. 

Era el. Era Harry. Llevaba una remera blanca con un tapado encima, unos pantalones negros muy ajustados que remarcaban perfectamente su silueta y unas botas marrones. Su pelo estaba recogido en un rodete con trenzas a los costados. Su semblante se mantenía serio, pero sus ojos brillaron cuando vieron a Louis.

- Ho-hola.- Dijo el ojiazul. tratando de esconderse de su mirada penetrante.

- Hola. Perdón molestias.- El vaho salia de su boca con cada palabra.- Quería ver. Como estas?

Louis estaba completamente confundido. Nunca antes alguien se había preocupado por el, solo su madre y Liam. Y que aparezca un Alfa desconocido  preguntando como estaba era muy extraño.

- Bien bien, estoy bien, tu?

- Bien.- Harry miro hacía el interior de la casa como si estuviera buscando algo.

Louis quería invitarlo a que pasara pero estaba muriendo de miedo. Supo que Harry lo sintió cuando su cara cambio a una expresión de preocupación y se alejo unos pasos.

- No quiero dañar Louis. Quería saber como iba la quemadura.- Parecía honesto.- Quede preocupado.- Y eso termino de convencer a Louis de no le haría nada, o eso quería creer.

- Quieres pasar? hace frío para hablar afuera.

Vio a Harry asentir y acercarse a la puerta. Louis se corrió, dejando un espacio para que este pasara. Paso casi rozando su cuerpo y eso le envió un choque eléctrico por toda su anatomía. Pudo sentir el olor varonil del ojiverde entrar por su nariz, era un olor dulce y picante. Al pasar por su lado noto que Harry le pasaba por una cabeza. Eso sin dudas lo intimido un poco.

-Mi quemadura va muy bien.- Dijo obteniendo la atención de Harry.- Ya no me duele y esta desapareciendo.

- Muy bueno.- Una pequeña sonrisa se formo en los labios del mayor.- No trabajas?

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