Simón comprende que Juan Pablo no es culpable de las penas y tormentas que han pasado él y su familia durante doce largos años, pero aún así sus vidas se unen de una forma que ni la propia razón podría llegar a comprender y todo por un siniestro pro...
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Isaza estaba poco convencido de la explicación que Villamil le había dado.
Después de comentarle lo dicho por el hotel esperó cerca de cuatro horas la respuesta del chico, le preocupaba mucho lo que pudiera pasar, y aunque prometió a su pequeño compañero de vivienda no decir nada del plan de Simón las ganas de arrancarle la cabeza al de gafas seguían ahí.
Luego de ese tiempo Villamil contestó sus mensajes. Dijo que estaba bien, que no lograba acordarse de que Simón y él ordenaron servicio al cuarto. Pero el recuerdo volvió a su mente.
De: Villamil Hermoso <3
Para: Isa :3
"No te preocupes Juan, ahora recuerdo todo. Yo estoy bien, ¿Martín cómo está?"
Y ahí estaba otra vez su lindo amigo, tratando de evadir el tema. Tratando de mentirle a la única persona que lo conocía de pies a cabeza después de sus padres, al que le confiaba sus secretos.
─ Ay Villito, ¿Cuándo entenderás que conozco cada secreto tuyo, cada gesto que haces o cada palabra que escribes para aparentar seguridad? ─ Suspiró para sí mismo. ─ Conozco cada lunar que hay en ti.
─ ¿Isa? ─ Giró detrás suyo encontrando a Martín en su pijama, el cabello suelto y pantuflas de oso. Casi se muere por la ternura.
─ Pequeño, creí que estabas dormido. ─ Martín negó con una sonrisa.
─ Cierto gigante no me dejó hacerlo con sus delirios... Eres muy raro Isa.
─ Disculpa si te molesté pequeño, solo estaba pensando en cosas.
El semblante de Martín se tensó.
─ Villa... ¿No es así?
¿Para qué mentir si el pequeño sabía de sus sentimientos hacia el castaño?
─ Sí... Con todo respeto Martín, pero tu hermano es el rey de los imbéciles.
Martín suspiró.
─ Simón no es malo, sólo está equivocado.
Para este punto ambos estaban sentados a cada lado en el diván de la sala de estar. Concentrando su vista en el mismo mosaico del piso. ¿Qué era toda esta mierda?, A perspectiva del mayor Simón es un imbécil y estaba seguro que lo mismo pasaba por la cabeza del menor.
Pero era siempre él, "Simón el idiota", ese maldito que no le permitía ser honesto con su amigo. Que lo hacía sentir una mierda al ver la ilusión en los ojos de Villamil...
Daría lo que fuera por estar en su lugar. Y ese imbécil no sabía cuánto lo anhelaba, él tiene esa ventaja y aún no se da cuenta de cuán afortunado es.
Sentía envidia, rabia, odio... Y no podía expresarlo abiertamente gracias a la promesa que le hizo a su pequeño cuando descubrió todo.
─ A veces me pregunto qué pasará cuando Villa se entere de todo. ─ Martín centró su atención en él y en las lágrimas que descendían de sus ojos avellana, verlo así fue tan horrible. ─ Dime Martín, ¿Crees que me odie?
