Vampire Academy (Una decisión podrá salvarlos) ©

Capítulo 25.

— ¡OLIVIA! —abrí los ojos, me alejé de Christian lo más que pude tratando de comprender la situación, él calló al suelo algo aturdido y Sam apareció mirándome preocupado. — ¿Qué acabas de hacer? —me ayudó a levantarme y me senté en la camilla.

No es posible que yo haya dejado así a Christian. Era la peor persona en todo el mundo, lo volví a ver y ahora tenía su mano en su cuello, se la sacó y vio su sangre en ella. Cerré mis ojos, al probar la sangre de Christian toda esa ansiedad había salido de mi cuerpo como por arte de magia. Sam ayudó a levantarlo, él se soltó y dijo que estaba bien.

Volteó a verme y me sonrió sin ganas —Cuídate —soltó y salió de la habitación.

¿Cuídate? Me tiré a la cama frustrada y me volví a tapar con la manta, Sam se acercó y se sentó en el borde sobándome la cabeza — ¿Te sientes mejor? —negué con la cabeza

—Ya no tengo esa ansiedad, pero lo que le hice a Christian no tiene perdón

—Te perdonará estoy seguro —me sonrió —Ahora descansa —se levantó y apagó la luces cerrando la puerta.

Desearía que me quedara en la oscuridad para toda la vida.

Christian P.O.V

Eso había sido muy doloroso y decepcionante a la vez, sentir los colmillos de Olivia encima de mí fue realmente raro.

Sam limpió mis heridas y puso una gasa, dijo que estaría bien ya que ella no había tomado mucho. Le agradecí y fui a mi salón de clases, me senté último sin prestarle atención a nada ni a nadie. Alexa me saludó pero la ignoré por completo, por mi mente solo pasaba la imagen de Olivia sonriéndome tan malignamente, esa no era la Olivia que yo amaba.

Comencé a jugar con mi pluma, el maestro me entregó una hoja, lo miré extrañado y él me señaló la pizarra.

Perfecto, había olvidado todo lo que estudié para este examen y lo peor de todo es que era uno de recuperación, cogí la hoja y la puse sobre la mesa, puse mi nombre, me paré y se la entregué al maestro.

—Joven Murray, su hoja está vacía —asentí y salí del salón.

Si tenía suerte me lo tomaría de nuevo, fui a la cafetería por algo de helado, siempre me calmaba.

Tengo que pensar en algo, no estoy enojado con ella pero lo que hizo, no puede evitar sentirme como si...

No lo sé, necesito calmarme, necesito hablar con ella luego.

— ¿Joven Christian? —me giré y vi a Rosie con los demás chicos — ¿Qué hace aquí?

— ¿Le importa? —sabía que no debía responderle así pero no tenía ganas de estar con nadie

—Claro que me importa, no puede andar solo y lo sabe, es más ¿Qué le pasó en el cuello? —abrí los ojos tocándome la herida. Mis ojos volaron hacia Thom, que entendió al instante quien había sido la culpable y agachó la cabeza.

—Nada importante, ¿Nos va a dejar a nuestras habitaciones? —ella sintió.

—Pronto saldrá la señorita Alexandra, pero antes tendrán que acompañarme al sótano —alcé una ceja, ¿Qué vamos a hacer en el sótano de la academia?

Asentí sin importancia y los seguí.

Olivia P.O.V

—Olivia —canturrearon mi nombre, me moví incómoda y abrí mis ojos lentamente.

—Sam, quiero seguir durmiendo —él sonrió y me despeinó —Deja de hacer eso, no soy un perro—me senté y lo miré.

—Te gusta—sonreí.