Capítulo 1

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Antes de la expiración


- Erzebeth - dice una voz en un suave susurro.

Giro mi torso, de manera que mis extremidades se arrastran lentamente por la cama, y estrujo con fuerza mis ojos, deseando hundirlos en lo más profundo de mi cráneo para así evitar otra incipiente mañana.

Erzebeth duerme en este momento, favor de callarse, gracias.

- Erzebeth is dead, despierta.

Abro los ojos lentamente, con actitud enojada y dispuesta a insultar a quien sea osara despertarme, pero al ver su rostro olvido todo y sonrío. Sus ojos siempre me sacan de balance, me roban el aliento, y es que son grandes, expresivos y penetrantes: evocan a un enigma. El enigma del que me enamoré.

- !Erzebeth!- grita. La paciencia nunca ha sido su fuerte.

- ¡Ya he despertado!- mi tono suena enojado, pero si prestas atención a las vibraciones, logras entrever una sonrisa.

Bufa y niega con la cabeza. Su mano alcanza su frente, desciende por los párpados y finalmente reposa en el mentón.

- Sabes,- dice, su voz rasposa como una lija - todo sería más fácil si te quitaras esa fastidiosa máscara.

- Es solo que...

- Ya sé, ya sé. No estás lista para que te vea, ¿cierto? - la ironía envenena su voz y tuerce su semblante - ¿Cuándo dejarás de inventar excusas?

- Kelly..., hablamos cada noche. Conoces cosas de mí que nadie más hace. Tú tienes mis pensamientos y emociones, todo lo que soy lo comparto contigo y solo contigo. Eso es mucho más que la simple cáscara que me envuelve.- retuerzo nerviosa mis dedos y dejo que un suspiro entrecortado salga de mí. - Además, aún no es tiempo.

Mira fijamente el plástico que recubre mis ojos, provocando que mi respiración se detenga. Con mi mano derecha estrujo las sábanas de la cama y por un segundo considero quitarme la máscara. Pero el segundo es exiguo, demasiado exiguo.

- Da igual, llegarás tarde a la escuela.

- Kelly. Kelly, espe...

La imagen en la pantalla regresa a la página inicial dando a entender que Kelly me ha cortado, otra vez.

Suspiro y dejo caer mi cabeza hacia adelante, en señal de derrota. Kelly... no sabes cuánto deseo que me veas. Eres la única persona que realmente me conoce, puedes predecir mis movimientos e identificar mis gustos, soy más sincera contigo de lo que soy conmigo... y aún así no puedes saber quién soy en los pasillos de la escuela, ni puedes llamarme por mi verdadero nombre, solo conoces el de usuario.

Con un movimiento quito mi máscara antigás y la peluca que simula un cabello largo, lacio y negro. La máscara fue un regalo de cumpleaños por parte de mi abuela dos años atrás, cuando cumplí doce años y la peluca es de mi disfraz de tercer grado, el cual usé para pedir dulces de uno de los miembros de la familia Addams: la madre, Morticia Addams.

Cierro la tapa de la laptop y columpio mis piernas en la orilla de la cama mientras observo mi habitación. Al inicio el cuarto lucía limpio e iluminado, pero ahora, debido a todos los objetos apilados en estanterías y el suelo, el espacio es muy reducido. Libros, cofres pequeños, espátulas, frascos y demás antigüedades decoran mi santuario, la colección va desde alfileres de sombrero de mediados del siglo pasado, hasta un candelabro oxidado que mi hermano encontró en una venta de garaje.

Jack nació un año antes que yo, una total sorpresa para mis padre, pero una buena que fortaleció sus sentimientos. En la escuela nos conocen como los "creepys" del colegio.

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⏰ Última actualización: May 08, 2020 ⏰

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