Los breves recuerdos que tengo de mi infancia están teñidos de sangre y de la oscuridad del templo que me cobija en estos momentos.
Mientras que los recuerdos de Saga, poseen colores y vida.
Jamás tuvo la necesidad de ocultarse entre las sombras, ni de observar a lo lejos a los demás niños que jugueteaban alegres por las ruinas, mientras él moría de ganas por ser un integrante de esas travesuras.
Jamás tuvo que estar en silencio, callado cuál tumba.
El dio a conocer su voz, él no tuvo que acallar sus sollozos a mitad de la noche para no despertar al otro. Saga, Saga, Saga... Él tenía nombre, tenía voz, tenía vida, tenía todo... Él tenía felicidad aunque a veces no lo sabía.
Él jamás tuvo miedo de ser descubierto por los aprendices, jamás tuvo que entrenar a solas y leer miles de libros para conocer las técnicas de Géminis, pues tenía maestro y yo, jamas tuve nada... Solo a él. Por el fue que aprendí a moverme en otra dimensión, a estallar galaxias. El fue mi maestro, mi amigo y confidente... Mi todo. Aunque yo no fui todo para él.
Si lo pienso bien, Saga no hubiera sobrevivido a la soledad. Él no es apto para estar solo ni en la oscuridad.
Su luz, a pesar de ser demasiado fuerte y segadora, hubiera cedido en cuestión de días a la temible oscuridad. Hasta cierto punto, es débil, igual que yo. Yo acepte mi destino, acepte todo eso para verle feliz y lo haría de nuevo en caso de ser necesario. ¿La razón? Porque lo amo más de lo que me amo a mi mismo.
Y ahora que esta aquí tendido a mis pies, con sus ojos cerrados, su cabello azul que en momentos adquiere un tono negro, sus labios entre abiertos exhalando con dificultad... Teniendo una lucha interna contra el maldito Dios Ares que intenta arrebatarle de nuevo el control de su ser, solo una cosa pasa por mi cabeza, y no es necesario ponerle nombre
No lo haré por la patética de Athena que yace arrodillada envuelta en su cosmos magnífico, ni mucho menos por los Santos que apenas y se sostienen en pie, y tampoco por Shion que me observa a lo lejos empapado en sangre. En su mirada rosácea hay esperanza de que yo acabe con esta guerra mientras empuño la Daga de Athena en alto para acabar la vida no sólo de Ares, también con la de mi hermano: el hombre que amo... No lo haré por ellos. No lo merecen. Si mueren, que lo hagan. No fueron lo suficientemente fuertes para vivir.
"Ares, Dios de la Guerra... Quiero hacer un trato contigo... Te entrego mi alma y mi cuerpo sin oposición alguna. Seré solo tuyo y de nadie más... Me entrego a ti a cambio de mi hermano"
Deseo con fuerza que mi plegaria sea escuchada por el Dios, mientras arrojó la Daga, a lo lejos escucho los gritos enloquecidos de Shion y un chillido por parte de Saori. Me arrodillo ante mi hermano y le tomó de la mano con fuerza, su respiración antes agitada cambia por momentos a una más tranquila.
Lo hago por él.
"¿Me darás tu vida por la de tu hermano?" una voz siniestra hace eco en mi cabeza "¿Me darás todo de ti?"
"Si"
Lo hago por él.
"¿Cada latido de tu corazón?"
"Si"
Lo hago por él.
"Ay mi niño" dice entre risas "Aunque los latidos sean míos, se que cada uno dirá su nombre, Pequeño Mortal, se que tu alma ya tiene dueño... Y ese dueño es mi reencarnación, Saga...
Te diré algo, Kanon, el amor y yo somos iguales, ambos destruimos todo a nuestro paso...Nos importan poco las consecuencias, la guerra y el amor cambian, transforman, exigen sacrificios... Y el tuyo me parece muy noble, desinteresado... Cursi pero entendible..."Lo haré por él.
"Y aceptable.. Acepto el trato mortal... Puedo ver que seras la marioneta perfecta para mi, y descuida. A Saga no le pasará nada, es mi reencarnación, tu solo eres... Mmm... Una segunda opción... Me imagino que no te molesta para nada serlo, toda tu vida has sido la luna y Saga a sido el sol... Estas acostumbrado a robar de su intensa luz. Por tu sacrificio, te premiare, mortal, llegado el momento volveremos por Saga, será solamente nuestro y de nadie más. Si llegas a dejar de ser me útil, volveré a mi cuerpo real, y sabes bien que es Saga, pero descuida, yo me encargaré de que estés en los Elíseos por tu tiempo que estés conmigo y, cuando sea hora, Saga estará ahí contigo, para amarse eternamente..." sus últimas palabras destilaban desprecio. Era obvio que odiaba lo cursi.
Un fuerte dolor de cabeza nació de repente, sentí como si me fuesen arrancar el corazón del pecho... Un escalofrío me recorrió cada extremidad del cuerpo... Observe mis cabellos, poco a poco adquirieron un tono oscuro, negro. Con forme el dolor crece, caígo al suelo, sin soltar la mano de Saga. Los gritos de Athena se hacen más lejanos... Casi no les escucho ya, solo a Ares
"Ahora, Kanon, tu y yo somos uno solo"
–Solo lo hago por ti, Saga... Por que te amo... –susurro. Observó el semblante de Saga con mis propios ojos por última vez, me grabo a fuego sus facciones tranquilas. Siento frío nuevamente y a la vez un fuego intenso, mi cabeza me da vueltas, me siento débil: vulnerable...
"Uno solo" escucho en mi mente.
Siempre he sido de Saga... Saga es mi otra mitad.
–Te amo, Saga... –logro decir entre jadeos.
Después todo es oscuridad... Solo oscuridad.
"Te amo más de lo que me amo a mi mismo"
Fin
Este fic nació el 13 de mayo del 2019...casi un año oculto en unas conversaciones de WhatsApp!! "😱
Espero me dejen su opinión, no es un fic bueno, como la mayoría de los fics que tengo... Pero de todo corazón espero que les haya entretenido aunque fuese un ratito... ¡Gracias por leer!
ESTÁS LEYENDO
Lo hago por ti
FanfictionDespués de regresar a la vida, los santos se enfrentan a un viejo enemigo, al que derrumbó la Orden Dorada en cuestión de segundos; Ares. El Dios de la Guerra a vuelto... Y a regresado por Saga. Una alma por un alma. La imagen empleada de portada no...