El mundo en cincuenta palabras (2016)

Prólogo

A menudo os habéis referido a mí como "capitán" de Cincuenta palabras. Pues bien, ahora disfruto de una tripulación envidiable, que mantiene una velocidad de crucero como para echarse y disfrutar de la brisa marina. Viento en popa a toda vela, vamos. Atrás han quedado los días de zozobra y los golpes de timón. Nuestro último botín, por supuesto, se titula El mundo en cincuenta palabras.

Y digo envidiable porque toda página web sueña con albergar una comunidad más llena de personas que de usuarios. Suena ñoño, pero es así. Desde que se publicara la primera antología, Cincuenta y pico palabras, las visitas se duplicaron como por arte de magia, llegó gente nueva y la vieja guardia recobró energías para mil relatos más. El efecto inmediato fue disfrutar de tres textos diarios; sin embargo, mucho más impresionante resulta la dedicación y el espíritu de camaradería que ahora se respira entre los comentarios a las historias.

En este sentido sólo puedo expresar mi más sincera admiración por tanta buena gente que con esmero comparte sus impresiones siempre que encuentra tiempo para ello. Soy consciente de que es una suerte poder publicar algo y comprobar cómo reaccionan otros aficionados, descubrir interpretaciones diferentes y, en definitiva, obtener una experiencia mucho más completa como escritores. Para mí es un gran objetivo cumplido, y es todo mérito vuestro: habéis aportado una nueva dimensión a Cincuenta palabras. Gracias a vuestra pasión y compromiso, un proyecto arriesgado y más bien marginal se ha convertido, por qué no decirlo, en un espacio de referencia en el ámbito del microrrelato en español. Y lo que queda por venir.

En este periodo también he tenido ocasión de poneros cara a algunos de vosotros. De aquel encuentro surgió la idea de determinar un jurado popular cada mes, encargado de puntuar cada relato para hacer más justa la elección de los ocho finalistas en la votación mensual. El sistema lleva en marcha desde febrero de 2015 y el resultado ha sido muy positivo; un ejemplo más de vuestro compromiso, que tanto aprecio.

Novedades aparte, un año de leer y escribir en 50 palabras da para mucho. Alguien podría pensar que el mundo es limitado, que antes o después terminaríamos por exprimirlo, pero nada más lejos. Este libro prueba una vez más que cada autor, en cada ocasión, le extrae un jugo diferente. Os lo garantizo: aquí dentro se esconden ideas e historias que, en su inmensa variedad, no desentonarían en una fiesta de alto copete literario.

En consecuencia, es lógico que muchos de vosotros ya seáis auténticos expertos en la materia. Por eso, para esta ocasión, he invitado a diez veteranos —cincuentistas de éxito y comentaristas habituales—, a plasmar lo que quisieran acerca de su experiencia en Cincuenta palabras. Mención aparte merece el primero de ellos, José Antonio, que hace poco se colocó en cabeza del ranking con la friolera de 50 historias publicadas.

Antes de dejaros con ellos debo repartir el último puñado de gracias a Ignacio Urtiaga, que materializó de forma brillante la cubierta del libro y tuvo asimismo la paciencia y generosidad para poner al día el interior y, en fin, acometer el rediseño general de Cincuenta palabras allá donde hiciera falta. Mil gracias, de verdad; si no fuera por ti, esto no luciría como merece. Ya que nos hemos propuesto codearnos con la flor y la nata de la literatura, qué menos que lucir de etiqueta.

Que disfrutéismucho de esta variopinta antología, en la que he tratado de poner un empeño ypasión a la altura de vuestras creaciones.

Alejandro Garaizar

Lee el libro completo y descárgalo gratis en: cincuentapalabras.com/p/libro.html