LOS CHICOS DEL PROCESO ⏳ (Editando&Corrigiendo)

(12) Un trío peligroso

Las memorias tal vez nunca vuelvan pero los juegos entre ellos harán que un odioso corazon.

¡Sábado! Al fin.

Después de estar con mis hermanos en la institución arreglando algunas cosas salí de compras, he aprovechado algunos dias para intentar hacer cosas diferentes.

Familiarizarme con cosas que antes hacia y que de alguna forma eran parte de mi.

He visto ya varias tiendas, Lucy no quiso irse con Luck y decidió acompañarme y debo admitir que fue demasiado divertido salir con ella. No me había dado el tiempo de compartir un poco más con ellos.

Y en resumen mis hermanos no podrían ser más pendejos lo que me llevó a pensar que en cierta forma yo parecía ser más madura que ellos pero solo en algunos aspectos.

Después de comprar ropa y una que otras cositas fuimos por helado y luego a casa. El día de estaba tomando raro como si amenazara una tormenta.

*****

Llegamos a la casa y me encuentre con mi santa madre a veces me pregunto si llevaba una buena relación con ella en el pasado y si así fuera, de todos modos no veo razón de por qué es tan fría.

Entiendo que a nadie se lo he puesto fácil pero ella tampoco se ha esforzado mucho en tener un acercamiento conmigo. Esta familia es demasiado extraña.

Tengo la impresión de que daría lo que fuera por que yo cambiara pero nada más.

- Buenos días mis niñas - Nos sonríe y me sorprendo

- Buenos días - Reímos por hablar al unisono

- ¿Como sigues? - Me toma del brazo al pasar

- Mejor, o sea no lo sé  - Le doy una sonrisa de boca cerrada

- Debes volver al psicólogo Kathia - Asiento y desvío la mirada hacia mi nana

Me acerco a ella y la abrazo fuerte.

- Ven conmigo nana - la guío fuera de la cocina

- Tu dirás mi niña, que necesitas -

- En unas horas llegarán dos compañeros de clase uno de ellos ya lo conoces - Luedo los ojos - Lo que necesito es que prepares algo de comer estaremos estudiando en la antesala nana - Asiente y besa mi mejilla

Subo corriendo a mi habitación y me quedo estática en la puerta al entrar. Cuando el momento de alegría desaparece y vuelvo a estar sola mi mente intenta jugar conmigo.

Dejo las bolsas a un lado, camino hacia el espejo y peino mi cabello al observarme solo descifro una incógnita sobre mí.

¿Quién soy?

Es esa absurda pregunta que no me deja en paz, tal vez crean que soy fría o mala y que nada mas me importa más que yo misma.

Pero en esta situación desconfío de todo y de todos no debo hacer caso a nadie, y menos portarme bien como deduzco que era antes.

No puedo hacerlo solo con palabras.

Soy otra, y no voy a cambiar no voy a parar por nada ni por nadie y si tengo que pasar por encima de todos para lograr todo lo que quiero ¡Lo haré!.

No me importa tengo que hacer algo.

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Estoy casi quedándome dormida cuando escucho que tocan mi puerta insistentemente.

- Adelante - tapo mi cabeza con la almohada

- Mi niña tus amigos ya están aquí esperando por ti - ¡Cuánto dormí!