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Mientras camino por la ciudad en compañía de aquel hombre que se hace llamar mi prometido. Siento que algo no cuadra, algo no conecta con lo que fui antes del accidente, pero creo que son estupideces, síntomas del post accidente. Por la ventana del auto veo a una niña pequeña, su cabello negro como el carbón y ojos azules llenan mi corazón de angustia.
Mi amor ¿Escuchaste lo que te estoy diciendo?.- miro de reojo al Azad quien me mira con sus grandes ojos negros. Me volteo y lágrimas caen de mis ojos, esa pequeña me ha dejado mal, debe ser por que perdí a mi bebé en ese accidente. Limpio mis mejillas y volteo a donde está Azad, trato de sonreír.- ¿Vanessa, estás bien?.- asiento
¿Puedes parar el auto por favor? Necesito aire.- Azad detiene el auto, bajo y camino en dirección al parque donde vi a la pequeña niña.
¡Vanessa!.- no hago caso a los gritos de Azad, cuando llego al parque la pequeña niña llora por qué se a perdido. Me acerco a ella y me pongo a su altura.
Tranquila cariño, todo estará bien, encontraremos a tus padres.- quito de sus mejillas todo rastro de lágrimas.- ¿Como te llamas?
No puedo hablar con extraños. Papi dice que no es correcto.- habla fluidamente el italiano.
Quiero saberlo, así puedo encontrar a tu papá.- miro a la pequeña que me mira con cara de pocas amigas.
Me llamo Bianca Bartollini. ¿De verdad encontrarás a mi papi?.- miro a la pequeña a sus bellos ojos color cielo.
Claro que sí, solo debes decirme el nombre de tu padre o de quien te acompaña esta tarde en el parque. - ella me mira tímida con cara de preguntarme si de verdad debe confiar en mí.
Pues he venido con Natalie, mi niñera, ella fue a comprar un helado, la perdí de vista. - sus bellos ojos se cristalizan dejando en mi corazón una especie de dolor que no comprendo del todo.
No te preocupes mi amor, encontraremos a Natalie y verás que volverás a ver a tu padre pronto.- tomo de la pequeña manita a Bianca y caminamos por el parque buscando a su niñera. Mis ojos se encuentran con los de Azad quien me mira con desapruebo. Sin tomar en cuenta su mirada prosigo buscando a la niñera de esta pequeña niña.
