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Nueve meses después...

El tiempo volaba y por mucho que la granadina quisiese pararlo y quedarse al lado de la gallega, era una cosa imposible.

Las dos iban al mismo festival, tras mucho tiempo sin hablarse. La gallega seguía igual de trabajadora y solo preocupándose por dirigir la gira de "La Dirección De Tu Suerte" tenía que reorganizar todos los conciertos tras la pandemia mundial que habían pasado.

La granadina se despertó con resaca en la habitación de su hotel. Mientras que la gallega seguía más fuerte que nunca, la granadina cayó en un pozo sin fondo. Ella no sabía ni el por qué se sentía asi, en el fondo lo sabía pero no lo quería admitir. Durante los últimos meses Patri se dedicó a lanzar hate a la granadina, haciendo que ya de por sí el hate que tenía creció de manera espeluznante en unos meses.

- Jefa tía - La movia de una lado para otro su compañera Dama.

- Para, por favor, voy a vomitar. - La granadina con mucho esfuerzo se fue a paso rápido al baño a vomitar después de los movimientos de su amiga.

- Te bebiste hasta el agua de los floreros. -Se ríe y se acerca para ayudarla. - Mimi, tienes que dejar de beber cada noche y más cuando al día siguiente tienes concierto.

La granadina sabía que tenía razón, pero le agobiaba el echo de que no sabia que le pasaba en su interior y no podía contestar en ese momento debido que estaba echando todo el alcohol.

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Tras unos cuantos golpes en su puerta y la gallega ya preparada fue a abrir a su hermano para ir a las entrevistas que tenían antes del festival.

La gallega estaba en un momento en su carrera que se sentía verdaderamente ella, aspiraba para esto. Aún así los nervios por esta noche no paraban de atacarla y a decir verdad es que nunca iba a cantar para tanta gente.

- Hola riquiño. - Se abalanzó a los brazos de su hermano como si fuera su salvavidas

- Vámonos ya riquiña, que tienes demasiado trabajo hoy pequeñaja. - Efrén la pico llamándola pequeñaja y tras ver la mirada de asesina de su hermana decidió que era mejor sacar una sonrisa que hacía que Miriam no se podría enfadar con él.

- Es que de verdad, no te aguanto -Rio y es que en realidad eso era mentira, el mayor apoyo que tenía la gallega era ni más ni menos su hermano Efrén.

La tarde se le pasó volando, el hablar sobre algo que le apasionaba le encantaba. Ahora mismo estaba descansado en su camerino antes de salir a cantar. Pero su momento de relajación se terminó cuando una rubia de ojos verdosos entró como Pedro por su casa en el camerino de la rubia de rizos.

- Hostia! Perdón illo. -La granadina vio al mánager, pero no sabia que era el mánager de Miriam. Por eso se fue sin saber qué la gallega estaba ahí.

La gallega se levantó rápidamente antes de que cerrase la puerta.

- ¿Neno ni un abrazo me das? - Dijo la gallega en tono vacilon viendo la cara que se le había quedado a la granadina. Y es que la verdad Mimi no se esperaba ver a Miriam esa noche por mucho que ella también fuera al festival. Después de nueve meses sin verla, era todo demasiado extraño.

- Hola leona! -la abrazo y sonrio- Pensaba que no te iba a ver.

- Eso no te lo crees ni tu Mimita ¿Qué tal estás?

La granadina no sabía que responder. Tenia dos opciones mentir o mentir. Parece que las dos rubias se cambiaron los papeles, ahora la que se guardaba todo era la de ojos verdosos y la que animaba a todo el mundo era la rubia de rizos.

- Bastante contenta - Resaltó la sonrisa más falsa que pudo hacer nunca.

- No sabes cuánto me alegro de verte. -La gallega se lanzó de nuevo a sus brazos. Ella sabia que la granadina no estaba para nada bien, podría mentir a quien quisiese pero a ella no. Pero tampoco era momento de hablar en pleno pasillo lleno de camerinos con demasiada gente. Por eso la gallega decidió que era mejor hablar más tarde.


Tras un rato hablando a la granadina le subió el ánimo verla tan feliz o eso pensaba ella porque en realidad con solo verla ya estaría feliz. La gallega tuvo que irse corriendo ya que era la siguiente en actuar y se quedó mirándola como la leona rugía junto a su público.

Nunca comprendió cómo en el escenario se vuelve una leona, que arrasa con todo y cuando sale de él se convierte en un pequeño gatito que solo busca mimos. Aunque nunca lo fuera a comprender siempre iba adorar ese aspecto de él y todos en realidad.

- Que te quedas empanada jefa! - Le asustó Saydi riendo. Ella era la única que sabia sus sentimientos hacia la gallega aparte de Ricky. Podía confiar en ella y daba los mejores consejos de todo el grupo.

- Serás imbecil - No pudo evitar mostrar una sonrisa mientras seguía viendo a la rubia de sus sueños. - Ya sabes que amo verla cantar.

- Y verla. No te engañes a ti misma porque así es como todo irá peor, acuérdate - Le sonrío abrazandola y de alguna manera u otra le daba los ánimos que necesitaba Mimi para poder salir al escenario y pegarlo olvidándose de toda la mierda que tenía bajo su espalda.

La gallega salió del escenario y vio a Mimi mirándola con admiración o eso creía ella porque en realidad le estaba comiendo con la mirada. Aunque Miriam para esas cosas no era muy buena porque no se daba cuenta nunca.

- Mimita!!! Te gustó? - Sonrío abrazada a ella, esperando los elogios que la granadina le decía siempre.

- Que te voy a decir, no estuvo mal.

- Te gusta hacerte la dura. - La gallega no evitó reírse al ver la cara que tenía la granadina en ese momento. Y es que a nadie le ganaba a la granadina a poner caras de indignación.

- Si ya sabes que cada vez que te veo cantar me da cinco mil infartos, hija de mi vida. Claro que lo has hecho genial. - La abrazó de nuevo y Juan le indicó que en diez segundos salían.

- Ahora me toca a mi que den diez infartos al verte arriba del escenario cantando. - La abrazo muy fuerte, como los abrazos que la caracterizaban y le deseo mucha suerte, que sin duda ella no lo necesitaba para nada. Porque lo que la gallega tenía claro que la granadina ha conseguido todo esto a base de muchísimo trabajo y sin duda nada de suerte.

Y así fue, Mimi lo peto. Toda la gente gritaba el nombre artístico "Lola"  y fue la primera vez de esa semana que sonreía de verdad. En ese momento pensó que ojalá cada día tuviese concierto para poder distraerse de sus pensamientos, pero no sería tan fácil.

Tras estar con sus chicas en el camerino y poniéndose ropa más cómoda, salió un momento a fumar. Le jodia el echo que ya no viera a Miriam hasta dentro de bastante, porque cuando se bajo del escenario la buscó por todos lados con la vista y no, ningún rostro de la leona.

-Vaya mierda -Dijo entre dientes la granadina soltando el humo del cigarro.

- ¿El qué?



ESPERO QUE OS GUSTE MUCHO. Pronto actualizaré y por cierto si os gusta también otra novela de bollodrama pero más currada la estoy creando. Se llamará "Roma" espero que os guste también. Gracias por el apoyo 🖤

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⏰ Última actualización: May 12, 2020 ⏰

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