Capítulo 10: Estoy Contigo.

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-¿Acaso sientes rencor por la Inocencia que tienes en tu cintura?.-me dijo muy seriamente el Corazón, su mirada parecía que estaba analizando mi mente.

-No.- cerré los ojos y respondí sinceramente. Aunque dijera una mentira, ella se daría cuenta. Tome el botón del abrigo de mi padre que tenía en el cuello, como si fuera mí recordatorio de esa promesa.- Mi padre me pidió que no sintiera rencor por nada ni por nadie, mucho menos que buscará un culpable de lo que paso. Además, él parecía entender que ese día era su final y que se entregaría a Darkness. Por eso aceptaré el sacrificio que hicieron todos esos exorcistas, incluyendo a mi padre, y honraré su muerte.

-Unas palabras muy sabias para una joven. No cabe duda que estas hecha para esto.- se fue sin decirme nada más. El Apócrifo se dio media vuelta y también nos dejó solas a Shuurei y a mi.

-No siento rencor por nadie ni por nada, pero no puedo evitar que duela... Es demasiado doloroso todo esto.- abrace mis piernas y me hice bolita, justo como acostumbra hacer cuando era niña y algo me preocupaba o me ponía triste.

-¿__? ¿Que haces aquí?

-Ah, hola Allen.- me había sorprendido verlo aquí. Como siempre, la sombra detrás de él lo seguía, pero intente ignorarlo.

-Parece que ambos tenemos un monstruo algo molesto para la Orden.

-¿A que te refieres?

-Pues, dentro de mí, existe el decimocuarto y es muy probable que este intente tomar el control. En estos momentos se está debatiendo si dejarme libre o encerrarme en un calabozo. Incluso creo que me asignarán a una niñera.

-Solamente porque esta Shuurei conmigo, si no, serían capaces de hacer lo mismo.

Levantamos la vista hacia el atardecer, un atardecer tan hermoso que parecía calmar nuestras aceleradas mentes.

-Deberíamos de entrar, esta comenzando a sentirse frío.- me ofreció su mano. La nueva residencia quedaba muy cerca de unas montañas y un bosque, lo que hacía que hiciera más frío que de costumbre.

Yo asentí con la cabeza y tome la mano de Allen para ponerme de pie. Entramos al edificio juntos.

En un lugar tan pequeño, era lógico que los rumores se difundirán muy rápido.

-Ese es el sagrado portador del Corazón. Dios está de nuestro lado de nuevo.

-¿Pero que hace junto a esa amenaza?

-Los jefes deben de estar locos al ponerlos juntos. Si se desata una pelea aquí, moriremos todos.

-...

-Está bien Allen, deberíamos de ignorarlos.

-Es solo que... Aún me siento incómodo con todo esto. Yo no escogí tener a esta cosa dentro de mí.- parecía demasiado afectado por todo lo que estaba pasando en estos momentos. Entendía perfectamente lo que estaba sintiendo, aunque mi situación no era tan mala como la de él. Rodee su rostro con mis manos y me puse de puntitas para alcanzarlo. Le di un pequeño beso en la mejilla.

Todos se congelaron al ver mí gesto. El Corazón y un Noah, definitivamente algo que nunca nadie imagino ver. Ni siquiera yo pensé que llegaría tan lejos, pero al ver su cara tan afligida, no pude evitar sentirme mal por él. Al separarme y ver su carita toda sonrojada y sorprendida, me di cuenta que no tenía en la cabeza a una cierta cosita dorada.

-Ahmm Allen, ¿Donde está Tim?

-Oh cierto, ehmm, no lo sé.

-Seguramente esta con el señor Cross.

Innocence (AllenxReader) (FINALIZADO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora